Este miércoles se ha inaugurado por fin el nuevo enlace entre la A-2 y la AP-7 en Castellbisball (Barcelona), una obra que ha durado 14 años, ha sufrido dos parones importantes y ha incrementado el presupuesto inicial en unos 40 millones de euros, de los 46,2 millones previsto inicialmente hasta los 88,20 millones de euros que ja costado finalmente.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha presidido la puesta en servicio del nuevo enlace entre la A-2 y la AP-7 y ha señalado que esta nueva infraestructura supondrá un beneficio para más de millón y medio de ciudadanos.
Acompañada por la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, y por el secretario general de Infraestructuras de Mitma, Sergio Vázquez Torrón, la ministra ha puesto en valor esta nueva conexión dado que supondrá una importante reducción de los tiempos de viaje, con un recorte de 7,5 km del recorrido actual, una mejora de la movilidad para los usuarios del Área Metropolitana de Barcelona y un gran beneficio para los municipios de la zona, lo que reforzará las sinergias que existen entre el Baix Llobregat y el ámbito de la B-30.
La ministra ha remarcado que este enlace se materializa una nueva conexión entre dos comarcas que son motor industrial y económico de Cataluña como son el Baix Llobregat y el Vallès Occidental.
En este sentido, Raquel Sánchez ha anunciado que el Ministerio tiene previsto someter a información pública este mes el proyecto de obras de terminación de la autovía de conexión de la Ronda litoral con la C-32 y, antes de que finalice el año, el proyecto de trazado del entorno del Baix Llobregat.
Con estos avances, según la ministra, se demuestra el compromiso para atajar la situación que los vecinos de Sant Boi viven en la rotonda de la C-245 desde que se paralizaron las obras.
Nuevo enlace entre la A-2 y la AP-7 en Castellbisball
La conexió permite realizar los movimientos entre la A-2 (desde Lleida) hacia la AP-7 sentido Girona, desde este miércoles liberada de peaje, e inversamente entre la AP-7 (desde Girona) hacia la A-2 sentido Lleida.
Para ello, se ha ejecutado un nuevo vial de dos calzadas separadas con sección de autovía uniendo los municipios de Sant Andreu de la Barca y Pallejá con los de Castellbisbal y Rubí, cruzando el río Llobregat, la riera de Rubí y las vías ferroviarias de Adif a través del nuevo viaducto del Llobregat, además de conectar con la carretera C-1413a de Molins de Rei a Vic.
El presupuesto de las obras asciende a 74,57 millones de euros que, sumados al coste de las asistencias técnicas vinculadas, de redacción del proyecto y control de calidad de las obras, y al presupuesto estimado de las expropiaciones, arroja una inversión total realizada de 88,20 millones de euros, que són unos 40 millones de euros de los previsto hace 14 años.
El nuevo enlace supone una gran mejora en la movilidad del Área Metropolitana de Barcelona ya que ahorra a los usuarios el actual recorrido de una distancia aproximada de 7 kilómetros y medio para conectar ambas vías de gran capacidad, lo que mejorará principalmente el nivel de servicio de la A-2.
Características Técnicas
El nuevo enlace entre la Autovía A-2 y la Autopista AP-7 en Castellbisbal ha consistido en la construcción de dos calzadas con dos carriles por sentido, que cruzan el río Llobregat, la riera de Rubí y las líneas de Adif (L.A.V. Madrid - Barcelona, Cercanías y Mercancías) a través de dos viaductos, uno por sentido.
La calzada derecha de la vía de enlace cruza además sobre el ramal Barcelona-Girona de la AP-7, por medio de un paso superior, discurriendo posteriormente paralela a la margen derecha de la AP-7 y conectando finalmente con la citada autopista.
La longitud aproximada total de viales que ha comprendido la actuación es de 6,5 km, teniendo el tronco de la autovía de enlace una longitud de 1 km. La sección transversal está formada por dos calzadas con dos carriles de tres metros y medio cada uno, arcenes exteriores de dos metros y medio e interiores de un metro y bermas exteriores de un metro y medio.
La actuación consta de diversas estructuras. La principal, el denominado “viaducto del Llobregat”, consiste en dos estructuras paralelas independientes de 874 y 836 metros, respectivamente. Se trata de dos estructuras mixtas de canto variable entre 3,5 y 5 metros.
Adicionalmente, se han ejecutado dos pasos superiores y uno inferior para salvar los cruces de la calzada del tronco del enlace en sentido Girona sobre la AP-7 y sobre el vial de acceso al cementerio de Roques Blanques, aparte del cruce de la carretera C-1413a.
También se ha realizado la restitución ambiental e integración paisajística de todo el ámbito del proyecto. En concreto, la restauración del entorno del río Llobregat y de la riera de Rubí, la integración ambiental en la zona de contacto con el Parc de Collserola y la restauración e integración de los distintos depósitos de tierras ejecutados.
Fin a los peajes en la AP-7 y la AP-2
La inauguración del enlace entre la A2 y la AP-7 coincide con el primer día sin peajes en la AP-7, entre La Jonquera y Tarragona, y en la AP-2, entre Zaragoza y el Vendrell. Un hecho que la ministra ha definido como histórico, tras la liberación de 477 km de autopistas que supondrá más de 750 millones de euros de ahorro para los usuarios.
Raquel Sánchez ha señalado que desde hoy circular por la Red de Carreteras del Estado en Aragón es un 76% más barato, tras liberar 102 kilómetros de la AP-2. Y también desde hoy, Cataluña está libre de peajes en las vías del Estado. La ministra ha asegurado que esto es un cambio radical para los usuarios.
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