Galicia realiza 10.000 análisis anuales de biotoxinas del mejillón para "garantizar" su venta y consumo seguro

La Comunidad gallega, a través del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar), efectúa 10.000 analíticas anuales de biotoxinas presentes en el mejillón para "garantizar" un consumo y venta seguros del producto.

De este modo, el seguimiento y análisis de los mejillones por parte de esta organización permite el consumo de unas 250.000 toneladas y da lugar a 2.000 informes previos a su extracción, además de 300 resoluciones por año de prohibición o autorización de la recogida de estos moluscos según zonas de producción.

Así lo ha explicado la conselleira do Mar, Rosa Quintana, este jueves durante su participación en la toma de muestras para analizar en Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), según informa la Xunta en un comunicado.

"ESTRICTOS CONTROLES"

Además, la titular de la Consellería do Mar -de la que depende el Intecmar- ha hablado de los "estrictos controles" que se realizan en este campo, ya que el centro identifica los distintos tipos de toxinas, así como su presencia por zonas de producción, con lo que establece cierres temporales.

Asimismo, ha recordado que la existencia de las toxinas constituye "un fenómeno natural" y se repite "en la mayor parte" de las zonas de producción de moluscos bivalvos de todo el mundo.

Por otra parte, ha destacado el trabajo del Intecmar durante el Estado de Alarma por la pandemia, ya que sus funciones "declaradas esenciales", contribuyeron al abastecimiento de mejillones con todas las garantías higiénico-sanitarias.

AFECTACIÓN DE LAS TOXINAS

A reglón seguido, la Xunta asegura que, de acuerdo a datos de Intecmar, la media de afectación de las biotoxinas lipofílicas a las zonas productivas entre 1998 y 2020 es más de un 25% al año y que, en general, las bateas situadas más al exterior son las que estuvieron mayor número de días cerradas.

De esta manera, la ría de Pontevedra es la que registra mayor período de prohibición de extracción debido a esta biotoxina, mientras que la ría de Arousa ha sido la menos afectada.

En otro sentido, la media de afectación en el caso de la biotoxina PSP o paralizante entre esos años es del 1,5% anual. Este tipo de toxina ha influido menos en la ría de Arousa y más en la de Pontevedra.

En cuanto a lo que se refiere a la biotoxina ASP o amnésica, afecta un 1% al año en mayor medida a las rías de Muros y Noia y Ares-Betanzos y en menor medida a la ría de Arousa.

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