El Ayuntamiento de València pretende consolidar y rehabilitar diferentes zonas de vivienda social de la periferia, también conocidas como de renta limitada, con un programa que se centra no solo en la intervención sobre los inmuebles, sino en todo el entorno mediante reurbanizaciones que eviten situaciones de degradación urbana y de vulnerabilidad social y que, a la vez, reactiven el parque privado de viviendas y pongan en valor el patrimonio moderno residencial de estos barrios. Para ello, la Concejalía de Vivienda ha elaborado un programa que optará a captar hasta 105 millones de euros de los fondos europeos de reconstrucción postCovid Netx Generation EU y que incluye 3.689 viviendas de 224 edificios en ocho entornos urbanos.

El plan municipal es el primer paso de un diagnóstico de ciudad más amplio (ver plano) y prevé su despliegue inicial en dos fases, con cuatro intervenciones en cada una de ellas. El documento se presenta en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno central, que gestionará 140.000 millones de euros en transferencias y créditos de la Unión Europea en los próximos seis años.

Carlos Gámez

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana invitó a los ayuntamientos a proponer manifestaciones de interés sobre la línea de actuación relacionada con las operaciones de rehabilitación edificatoria y regeneración y renovación urbana de gran escala, en barrios o zonas delimitadas en función de su nivel de renta y de sus necesidades y potencialidades. A esta invitación ha respondido el Ayuntamiento de València con este programa.

Contexto

Envejecimiento urbano. Según el documento, para el año 2030, en València, el 48,9% del parque actual de vivienda tendrá más de 50 años, con mayor concentración en las décadas de los 60 y 80. Por ello, afirma que es "especialmente urgente" intervenir en los grupos de vivienda social, también conocidos como bloques de vivienda de renta limitada que, en el caso de València, y a diferencia de otras ciudades, no se encuentran especialmente concentrados en un macropolígono, sino que están dispersos en la periferia de la ciudad.

Núcleos históricos de los barrios. Estas agrupaciones de viviendas sociales, surgidas a partir de los años cuarenta ante la demanda de la posguerra y tras la riada de 1957, son los núcleos históricos de los barrios populares de la ciudad. Sin embargo, el traslado de muchos residentes a nuevos desarrollos (PAI) con viviendas más confortables y accesibles, ha provocado su deterioro, al que no pueden hacer frente sus vecinos, con poca capacidad económica. Además, "quedan viviendas vacías y el entorno se va degradando, con lo que puede dar lugar a situaciones de mayor vulnerabilidad, guetificación y conflictividad con el resto del barrio", apunta el documento, y de ahí la necesidad de intervenciones preventivas.

Objetivos

Rehabilitar. El plan propone la rehabilitación de estas construcciones y su entorno prestando atención a situaciones de vulnerabilidad social y de pobreza energética.

Prevenir. Intervenir preventivamente en el parque residencial privado (social y envejecido) de manera "ejemplarizante, sensible, eficiente y sostenible", con pocos antecedentes en València (Plan RIVA de Ciutat Vella), avanzándose a una situación de necesidad de vivienda pública de sus habitantes.

Patrimonio. Reconocer y valorar el interés arquitectónico del patrimonio moderno residencial que discretamente (y ampliamente) ha configurado la identidad de diferentes barrios de la ciudad.

Ámbito y fases

Localizaciones. En la zona este se actuará en la Malvarrosa, V. del Carmen-Beteró, Amistat, Aiora y Natzaret. En la oeste, en Nou Moles, la Llum y la Fuensanta. En la norte, en Tendetes, Tormos, Marxalenes, Benicalap, Torrefiel y Orriols. Y en la sur, en la Torre y San Marcelino.

Primera fase. Incluye cuatro zonas: Virgen del Carmen-Beteró (año 1957, 21 edificios y 667 viviendas), Grupo de la calle Yecla-l’Amistat (1952, dos edificios con 475 viviendas), polígono de la Fuensanta (1958, 33 edificios con 975 viviendas) y polígono de Campanar-Tendetes (1961, 62 edificios con 580 viviendas).

Segunda fase. Prevé intervenir sobre el grupo Casitas Rosas-la Malvarrosa (1953-1959, 32 edificios con 255 viviendas), el grupo Virgen de los Desamparados de Tres Forques (1954-1965, 29 bloques con 218 viviendas), Grupo Ramiro Ledesma de la avenida de Burjassot (11 edificios con 84 viviendas) y San Marcelino (34 bloques con 435 viviendas). En resumen, se contabilizan 3.689 viviendas en 224 bloques.

Actuaciones

Conservación. Se propone actuar la cimentación, estructura e instalaciones; la mejora del estado de conservación de cubiertas, azoteas, fachadas y medianerías, incluyendo procesos de desamiantado, y la adecuación interior de las viviendas a las condiciones mínimas de funcionalidad, habitabilidad, seguridad e higiene.

Accesibilidad. Instalación de ascensores, salvaescaleras, rampas y otros mecanismos que faciliten la accesibilidad universal.

Eficiencia energética. Mejora de la envolvente térmica, nuevos sistemas de calefacción y refrigeración y equipos de generación o que permitan la utilización de energías renovables como la energía solar fotovoltaica, biomasa o geotermia.

Reurbanización de la zona. Propone remodelar los espacios públicos para dotar a los barrios de zonas verdes de dimensiones y diseño adecuadas, espacios libres peatonales que fomenten la estancia, la eliminación de todas las barreras arquitectónicas y la liberación de parte del espacio público ocupado por el automóvil para destinarlo al peatón.

Oficina de proximidad. Pretende facilitar la implementación y la gestión integral de los proyectos a través de esquemas de "ventanilla única" al servicio de los hogares, las comunidades de vecinos, profesionales y empresas con perspectiva de intervención social.

Presupuesto

principales partidas. El importe global de esta actuación asciende a 105,55 millones de euros, según la estimación de los técnicos municipales. La principal partida corresponde a la rehabilitación de viviendas (92,22 millones de euros), seguida de la urbanización de los entornos (12,21 millones). A la Oficina Itinerante de Proximidad se destinaría 1 millón y 120.000 euros a los estudios previos.

Ribó: "Debemos actuar sobre la ciudad construida"

El alcalde de València, Joan Ribó, afirma que la política de vivienda está siendo "una de las prioridades del Gobierno municipal en estos años", si bien reconoce que la ciudad viene "de una situación muy precaria, con un parque de vivienda pública ínfimo respecto a las necesidades reales". 

El modelo que propone para garantizar el acceso a una vivienda asequible y de calidad en la próxima década pasa por "actuar sobre la ciudad construida. No se trata de expandir la ciudad de una manera incontrolada e infinita, sino de dotar de vida a la ciudad consolidada", sostiene.

Para ello, aboga por sacar al alquiler asequible cuantas más viviendas mejor y por rehabilitar las de renta limitada para mejorar la vida de sus residentes y, a la vez, hacerlas atractivas al resto de la población para mudarse "y que no sean estigmatizadas".

Por su parte, la concejala de Vivienda, Isabel Lozano, pone el énfasis en la rehabilitación energética y en la accesibilidad de los inmuebles. "Las viviendas de renta limitada pueden y deben ser modernas, eficientes y atractivas. Son una oportunidad para muchas familias y muchas personas jóvenes, de hoy y del mañana", afirma. Del mismo modo, apunta la necesidad de actuar en la periferia para evitar el envejecimiento de los barrios y combatir la desigualdad social.