El candidato del PSOE, Ángel Gabilondo, ha asegurado que Madrid "tiene el dinero" suficiente como para financiar las ayudas de su programa electoral "sin tocar la fiscalidad", una de sus promesas más repetidas y, también, más controvertidas por las anunciadas intenciones del Gobierno central de subir los impuestos a partir de 2021. En el escudo social que propone destaca una ayuda extra de 400 euros anuales para los pensionistas no retributivos, un complemento de 150 euros mensuales para los perceptores del Ingreso Mínimo Vital u 80 millones de euros en ayudas directas para la hostelería.

Así lo ha asegurado este lunes en su visita a Leganés, donde le han preguntado sobre si, como propone Podemos, recortaría las subvenciones a la tauromaquia o si, como pide Vox, sacaría los fondos para las ayudas de los "chiringuitos". "[El dinero lo sacaré] de los Presupuestos de la Comunidad, que llevan dos años prorrogados", ha declarado. 

En este sentido, ha asegurado que se han de hacer unas "cuentas Covid", es decir, "que tengan como prioridad la apuesta por los servicios públicos". "Si hacemos eso", ha añadido, "hay dinero y más que habrá si nos apoyamos en el Plan de Resiliencia y Recuperación" de los fondos europeos. Los actuales Presupuestos de la Comunidad fueron aprobados por el expresidente Ángel Garrido en 2019 y prorrogados hasta ahora.

Asimismo, el candidato ha tildado de "impresentables" las declaraciones de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso sobre las colas del hambre. "Los mantenidos subvencionados que ellos crean, como las colas del hambre, para que la gente dependa de ellos", dijo la candidata popular, que ayer expresó que se estaban "retorciendo" sus palabras. "Lo que es una vergüenza no es que haya gente que vaya a pedir comida, sino que en Madrid haya pobreza", ha contestado el candidato socialista.

Gabilondo también ha centrado parte de su discurso en la "necesidad" de no entrar "en debates filosóficos del siglo XIX", en referencia al lema "comunismo o libertad", sino en "centrarse en resolver los problemas de los ciudadanos, como el paro juvenil". Contra el desempleo en el sector más joven de la población, su receta es una apuesta por la Formación Profesional. Por ello, propone llevarla a todos los municipios madrileños de más de 20.000 habitantes y crear 10.000 plazas nuevas, además de abaratar las matrículas universitarias a niveles de hace diez años.