La presión sobre el cuerpo de la mujer ha sido brutal desde hace siglos. Los diferentes cánones estéticos distan mucho del promedio femenino, minando la autoestima de millones de mujeres y buscando avergonzar a cualquiera que se salga de ellos.

Las redes sociales no han hecho más que acrecentar este problema, echando mano del photoshop para conseguir figuras extremas y, en ocasiones, irreales, para obtener la aceptación de una sociedad a la que le da igual la salud de una persona mientras consiga verse de una determinada manera.

Sin duda, las Kardashian han promovido esta nueva cultura de cuerpos exagerados, con grandes caderas y cinturas diminutas. Algo muy difícil de conseguir a no ser que echemos mano de la edición o el bisturí.

Es por esto que una de las últimas fotos de Khloé Kardashian ha causado un gran revuelo al aparecer tal cual es al natural, sin poses forzadas, sin tensar el cuerpo, sin buscar el mejor ángulo y sin una gota de edición. 

Por desgracia, no se trata de un acto de rebeldía hacia lo que su familia promueve, sino un gran error de su equipo que subió esa foto antes de retocarla. En seguida se dieron cuenta del error y corrieron a eliminarla, pero ya era demasiado tarde.

Con un bikini de leopardo, la más joven de las Kardashian aparecía tal cual era ella, enseñándonos que son tan humanas como todos nosotros, con unas proporciones de acuerdo a la biología de nuestra especie.

Este cuerpo dista mucho del que Khloé suele subir a sus redes sociales, mucho más tonificado y visualmente más delgado, pero sin embargo, más parecido al de sus seguidoras.

Mientras tanto, gran cantidad de estas personas han elogiado la foto de la celebrity, aunque también se preocupan por la cantidad de photoshop y del daño que puede hacer en ella misma y en los millones de fans que consumen constantemente sus fotografías.