Se trata de una actuación de la que ha informado el portavoz del Equipo de Gobierno, Kilian Cruz-Dunne, en la comparecencia posterior a la Junta de Gobierno Local. Ha apuntado que para la peatonalización "se proyecta una plataforma única, al estilo de la adyacente Saturnino Ulargui, para uso peatonal y uso restringido de vehículos".

Para su construcción "se demolerán las estructuras aceradas actuales situadas hacia la calle Marqués de Murrieta, y los bordillos, así como se levantará la baldosa existente en la zona", para posteriormente "ejecutar todas las instalaciones de saneamiento, abastecimiento, control de acceso, alumbrado, gas o telefonía".

En este punto, Cruz-Dunne ha señalado que "para facilitar la movilidad sostenible, segura y saludable, el calmado del tráfico no solo se conseguirá con la regulación mediante señalización vertical, sino también se incluirá en el diseño de la calle estrechamientos y una trayectoria en zig-zag, para asegurar la reducción de la velocidad de los vehículos en la zona de prioridad peatonal".

Ha recordado que antes de su peatonalización, en la primavera del año pasado, se convirtió la calle en vía de prioridad peatonal y se eliminó el semáforo que da continuidad al itinerario peatonal de Gran Vía "para evitar que las personas se acumulasen en este punto de la calle", y se hizo un "reparto de la calzada más proporcionado con banda de rodadura para el paso de coches a garajes y vehículos de servicios, compartida con los peatones".

Cruz-Dunne ha apuntado que el carril central "se estrechaba para dotar de más espacio a las personas y desaparecía el carril ciclista contra flujo ya que la bicicleta puede convivir en esta calle de prioridad peatonal".