Según han informado la Agencia Tributaria y el Instituto Armado, detuvieron el pasado 25 de marzo a M.M.R., de 26 años de edad y vecino de Vilamarín, como presunto autor de un delito contra la salud pública y otro delito de defraudación del fluido eléctrico.

Los investigadores habían detectado que, en una nave que había sido alquilada por el investigado en la zona de Formantaos de Viñas, en el ayuntamiento de San Cristóbal de Cea, se "había efectuado una instalación eléctrica irregular diseñada, supuestamente, para eludir el consumo de fluido eléctrico, percibiendo además un llamativo y característico olor a cannabis", han destacado.

Una vez localizado el arrendatario, en su declaración voluntaria, reconoció ser el autor de la alteración en la instalación eléctrica ubicada en la finca, modificación que, supuestamente, habría realizado con la finalidad de abastecer de electricidad a bajo coste a la plantación 'indoor' de cannabis que había instalado en la nave de la finca.

COLABORACIÓN

En el mismo acto expresó su voluntad de colaboración con los instructores y manifestó estar dispuesto a facilitar la entrada y registro de la nave anexa a la vivienda de la propiedad que tenía arrendada.

Tras inspeccionar las instalaciones, se hallaron en su interior tres invernaderos acondicionados para el cultivo de una plantación 'indoor' de cannabis, que albergaban 342 plantas de un tamaño entre 10 y 20 centímetros; otras 364 de un tamaño entre 1 y 1,5 metros de altura; así como útiles para el cultivo de las plantas (extractores, lámparas halógenas, calefactores, ventiladores).

Durante el registro se encontró que las 706 plantas estaban sembradas en macetas de fieltro y otras macetas de plástico en el interior de los tres invernaderos, dos de 50 metros cuadrados cada uno y un tercero de 16 metros cuadrados, que estaban provistos de lámparas calefactoras y otros utensilios de extracción de gases para evitar olores.

Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Instrucción número dos de O Carballiño.