Qué son los hurtos famélicos y penas: cuando robar se convierte en una necesidad

Imagen de archivo de un robo.
Imagen de archivo de un robo.
Chandara Tubchand / Freepik
Imagen de archivo de un robo.

El conocido como hurto famélico es la sustracción de bienes ajenos para atender las propias necesidades urgentes y vitales, como la alimentación, la vivienda, el vestido o los tratamientos farmacéuticos, entre otros.

Sustraer productos ajenos de primera necesidad sin emplear la violencia física o moral, de modo que sirvan para satisfacer las necesidades personales o familiares en un momento dado, no está castigado en algunas de las legislaciones, ya que es una causa justificada que exime al infractor de la responsabilidad criminal.

¿Qué dice el Código Penal del hurto famélico?

Es lo que sucede en la legislación española, ya que el artículo 20 del Código Penal contempla en uno de sus puntos que estarán exentos de responsabilidad criminal las personas que se apoderan de bienes ajenas por necesidad. 

Concretamente, este es el texto del Código Penal: "El que, en estado de necesidad, para evitar un mal propio o ajeno, lesione un bien jurídico de otra persona o infrinja un deber". 

Sin embargo, deben darse estos tres requisitos a la vez:

  1. Que el mal causado no sea mayor que el que se trate de evitar.
  2. Que la situación de necesidad no haya sido provocada intencionadamente por el sujeto.
  3. Que el necesitado no tenga, por su oficio o cargo, obligación de sacrificarse.

En caso de que no se den los tres requisitos, la persona no estaría exenta de responsabilidad criminal. Aun así, solo el hecho de estar en situación de necesidad, podría ser una circunstancia atenuante de la responsabilidad criminal.

De todos modos, si existiera una denuncia, aunque no exista una pena por el hecho de quedar el infractor exentos de responsabilidad penal, se establecerá un antecedente y, por tanto, si se repite el hurto en una segunda ocasión, no se podrá tipificar el delito como hurto famélico.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento