Desde hace muchos años el herpetólogo y divulgador Frank Cuesta está volcado con el que es el proyecto de su vida: la protectora de animales y refugio del que es fundador y que ha tenido diversos nombres, ahora, Cuesta's Shelter. 

El aventurero invierte todo el dinero que gana con sus trabajos en televisión (Wild Frank, en DMAX), con su escuela de tenis en Bangkok (Tailandia) y de las donaciones y vídeos de YouTube en su fundación, que se dedica a rescatar animales, acogerlos y reintegrarlos a su hábitat cuando es posible. 

Ahora va a ampliar el refugio con una nueva sede que está instalando en un terreno de 37 hectáreas (370.000 metros cuadrados) de bosque y tierras de labranza que acaba de comprar en Tailandia. 

Los terrenos se los ha comprado a una cooperativa que los usaba para cultivo y aún permitirá que un matrimonio mayor cultive parte de la hacienda, pues es su medio de subsistencia. 

Tres excavadoras trabajan ya en la zona, que tiene agua, para crear seis grandes abrevaderos a modo de lago, que irán unidos por un río artificial, lo que permitirá vivir allí y beber a diversas especies, que camparán a sus anchas por el terreno vallado. 

El proyecto también incluye la recuperación del terreno mediante el abonado con los desechos orgánicos de los animales, que podrían empezar a ser trasladados desde la antigua ubicación en apenas unos meses.