Ante la posibilidad de indulto para los encarcelados por el desafío soberanista en Cataluña, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha mostrado este miércoles su desacuerdo, alertando al PSOE de que si, una vez recibido el perdón de la pena, los líderes nacionalistas "volvieran al mismo camino", el gobierno cometería un "ridículo histórico".

El mandatario ha confesado su disgusto por el hecho de que los indultos "estén manoseados desde el punto de vista político". Y es que, para él, el lidel de ERC, Oriol Junqueras, se utiliza en Cataluña para "ganar votos" ante una próxima convocatoria electoral.

Asimismo, ha recordado que Junqueras, esta "figura de gracia" que no le hace "ninguna gracia" al manchego, "ya dijo que volvería" a cometer los mismos delitos en caso de salir de prisión.

En la misma línea, ha criticado que los independentistas encarcelados "digan que no quieren el indulto", algo que en su opinión se debe a que "camuflan que lo quieren pero quieren que sus votantes piensen que no", "es una ceremonia absurda".

"¿Qué pasaría si mañana se indultara y pasado mañana volvieran por el mismo camino los independentistas? Que el ridículo sería histórico", ha zanjado García-Page. Todo ello, poniéndose "en el lugar" del PSOE, pese a que este tenga "buena voluntad en pro de arreglar las cosas en Cataluña".