Se dice del teatro que está permanentemente en crisis. Lo está, y es una característica crónica que lleva siglos haciéndolo más fuerte. Ni siquiera el coronavirus, con sus impuestas restricciones, bajadas de aforo y demás impedimentos, ha conseguido o conseguirá vencer del todo al mundo de la escena.

Los humanos llevamos representando historias para otros humanos desde hace miles de años. Al mundo escénico lo sustenta la más fuerte emoción humana: el amor. El amor de los intépretes por mutar en otros, por emocionarse y emocionar, el amor de los productores y directores, y por supuesto, el amor de ese público que nunca deja de acudir    y que quiere reunirse y dejarse tocar el alma con el artede la escena.

Estos últimos 20 años el teatro y sobre todo, los musicales, han vivido un auge en España. Un despegar tal, que nuestro país y su buque insignia, la Gran Vía de Madrid, donde se concentran los grandes teatros y escenarios, se ha colocado a la cabeza mundial del espectáculo musical en español. En el año 2000 se hicieron en España    42.777 funciones de teatro en 4.721 recintos y con 12,6 millones de espectadores. Tras altibajos a lo largo de esos 20 años, el saldo era positivo en 2019, con 50.866 funciones en 5.126 recintos y 14,1 millones espectadores, según datos de los anuarios de la SGAE.

Cuatro obras longevas de la escena española

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  'La Katarsis del Tomatazo'

  El espectáculo más longevo, este 2020 cumple 26 años. Con formato de cabaret, tiene números musicales, de danza y teatro.
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  'Espinete no existe'

  Monólogo-espectáculo de Eduardo Aldán, estuvo 12 años en cartel (2005-2017), con más de 2.000 funciones.
• 3

  

  'Toc, Toc'

  Esta comedia se estrenó en 2009 y se ha representado desde entonces, con cerca de 3000 funciones y un millón de espectadores.
• 4

  

  'El Rey León'

  El 21 de octubre de 2011 se estrenó en el teatro Lope de Vega este musical. Ronda ya los 5 millones de espectadores y 3.500 funciones.

España es ya un destino internacional en el ámbito del teatro y todo un referente, pues también hay grandes representaciones en Barcelona y muchas grandes ciudades del país disfrutan de la visita de las producciones en gira. El saber hacer de nuestros profesionales y la calidad alcanzada alcanzó algunos hitos, como, por ejemplo, con El Médico, musical estrenado en 2018 y basado en la novela superventas de Noah Gordon, autor internacional que sólo cedió los derechos de adaptación a esta producción española. 

Antes, en 2012, se estrenó El último jinete, el primer musical original de gran formato que se estrenaba en el mundo en los 14 años precedentes. Con libreto de Ray Loriga se invirtieron 9 millones de euros en ponerlo en pie. Hoy no me puedo levantar, basado en las canciones de Mecano, se estrenó en abril de 2005 en el Teatro Rialto de Madrid. Un año después se estrenaba una versión en Ciudad de México, donde aún puede verse, después de acumular millones de espectadores en ambos países.

Hoy, hay tantas producciones que el mercado necesita savia nueva y profesionales de todas las edades y con capacidad de cantar, bailar e interpretar. De ahí que se haya creado recientemente la SOM Academy, Escuela de Musicales y Artes Escénicas, promovida por SOM Produce y heredera de la Escuela Billy Elliot y que esté proyectado otro centro de formación dedicado al musical en el Gran Teatro Bankia Príncipe Pio, aún en construcción.

Otros grandes estrenos en estos 20 años fueron obras como la versión de Disney La Bella y la Bestia (1999, 2007 y 2012), el intenso Cabaret (2003 y 2015), el alegre Mamma mia (2004 y 2017), el archiconocido Grease (2006, 2011, 2020), la locura de Los productores, con Santiago Segura y José Mota de protagonistas (2006), el multiversionado Jesucristo Superestar (2007), la superproducción de Los Miserables (2010), el incombustible El Rey León (2011), el rompedor La llamada (2013), el tierno Billy Elliot (2017) o el emocionante Anastasia (2018), entre otros.

Tres testimonios de los últimos 20 años del musical en España

Paloma San Basilio. Actriz y cantante, estrella del musical. "De una parte y a raíz del éxito de El Hombre de La Mancha que tuve el privilegio de protagonizar junto a mi querido Jose Sacristán, el incremento de obras musicales ha hecho de la Gran Vía madrileña uno de los espacios con mayor exposición entre las capitales europeas". "Otro aspecto innovador y muy interesante es la proliferación de pequeñas compañías. Esta atomización del teatro abre posibilidades y estímulos a profesionales".

Enrique Salaberría. Presidente del Grupo Smedia. "Iniciamos los dos mil con el gran resurgir de la gran Vía madrileña, una transformación cultural de la mano de Bautista Soler y Luis Ramírez que convirtió a finales de los 90 el teatro Lope de Vega en un gran teatro de musicales. Lo siguieron El Teatro Coliseum, Teatro Rialto y Teatro Edp Gran Vía en el año 2004. Eclosionó como eje de musicales y espectáculos de gran formato, recuperó el glamur olvidado, convirtiéndose en un referente". 

Daniel Mejías. Jefe de prensa experto en teatro. "Mi primer trabajo en Madrid fue la campaña de prensa de La Bella y La Bestia, uno de los primeros grandes musicales que se presentaban aquí. Desde entonces el cambio ha sido abismal. El teatro musical llegó para quedarse". "El teatro, y especialmente los musicales, se han convertido en una industria que ofrece trabajo a decenas de miles de personas; una fuente de inspiración para los espectadores".