"Todavía no ha dado tiempo a ver el impacto", ha indicado, para recordad que medidas como el cierre del comercio o de la hostelería no se toman por un número elevado de brotes en estos establecimientos, sino para reducir al máximo los contactos sociales en la región y que estos se limiten a los convivientes.

"El aumento de la interacción social puede hacer aumentar los riesgos", ha señalado Cofiño, que ha indicado que lo recomendable sería que cada ciudadano se comportara como si estuviera infectado.

Ha sido en una rueda de prensa sobre la situación epidemiológica en Asturias, donde ha estado acompañado de la gerente del Sespa, Concepción Saavedra, y el director de vigilancia epidemiológica, Ismael Huerga.

Cofiño ha insistido en la "situación muy preocupante" en el aspecto epidemiológico y asistencial ante la situación de "alto riesgo" que vive la región, que este jueves ha sumado 664 nuevos casos. "No podemos hablar de curva, es un crecimiento acumulado desde el verano y rápido desde octubre", ha explicado.

Por otro lado, ha explicado que se percibe una estabilización de los casos en Gijón, aunque los positivos han aumentado en Oviedo y en concejos como Langreo, San Martín, Laviana, Villaviciosa. Además, ha querido recordar que los colegios están demostrado ser un sitio seguro para los escolares.