El Govern aprobará este martes un decreto ley para impedir que se penalice a los trabajadores con las rentas más bajas y con mayor precariedad laboral (que han estado o están en un ERTE, en el paro o han encadenado diversos contratos). 

Se trata de trabajadores que por esta situación (tener más de un pagador este 2020) se ven obligados a hacer la declaración de la renta y que se pueden ver perjudicados. Según ha avanzado TV3, el decreto prevé rebajarles el IRPF a través de una deducción autonómica equivalente a la diferencia entre la cuota íntegra autonómica y la cuota íntegra estatal, siempre que la diferencia sea positiva. 

El ejecutivo prevé que la medida pueda favorecer a unos 250.000 trabajadores que cobran entre 14.000 y 22.000 euros brutos anuales.

El Departament d'Economia está acabando de cerrar los flecos de un decreto ley que tiene por objetivo ayudar a los trabajadores con mayor precariedad laboral y más perjudicados por la situación provocada por la pandemia de Covid-19. Desde el Govern, no obstante, también se exige al Estado que tome "medidas económicas concretas" y un "plan de choque urgente" que ayude a los ciudadanos de Cataluña, especialmente a los de aquellos sectores más afectados económicamente y socialmente. 

De hecho, hace unos días el vicepresident del Govern en funciones de president, Pere Aragonès, se dirigió por carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para exigirle la moratoria de los impuestos para los negocios más afectados por las restricciones.

El decreto ley del Govern de rebaja del IRPF es aplicable a contribuyentes con rendimientos íntegros del trabajo inferiores a 22.000 euros y que, por el hecho de tener más de un pagador, resultan obligados a presentar la declaración del IRPF (según el artículo 96 de la Ley del IRPF). 

Quedan excluidos de la normativa del Govern aquellos contribuyentes que solo perciben pensiones y otras prestaciones pasivas como rendimientos del trabajo porque la ley ya les exime de presentar la declaración, aunque tenga más de un pagador. Esta medida se hará efectiva cuando los trabajadores beneficiarios hagan la declaración del IRPF correspondiente a 2020, que será de abril a junio de 2021.