Para llegar a la plantación, los agentes tuvieron que bajar hasta el pantano por un lugar escarpado y coger una lancha, ha adelantado este martes el diario Segre.

A los cinco responsables de la plantación, varones, de entre 23 y 40 años de edad, de nacionalidad albanesa y sin domicilio conocido, la Guardia Civil les imputa un delito contra la salud pública por cultivo y elaboración de drogas.

Según la Guardia Civil, la infraestructura montada delataba "el nivel de profesionalidad de los detenidos, que llevaban meses viviendo en tres tiendas de campaña instaladas junto al lugar, en el que habían realizado la plantación, con la finalidad de vigilar y custodiar el cultivo".

Tenían también herramientas para el cultivo, así como abonos e insecticidas, generadores eléctricos y un equipo completo de bombas y mangueras, con las que captaban agua del pantano.