El interno se disponia a comunicar con su familia cuando al no personarse ésta, el funcionario de comunicaciones le ordenó que abandonase los locutorios y al acompañarle al módulo de enfermería, sin mediar más palabra, le propinó un fuerte puñetazo en el rostro produciendo presumiblemente la rotura del tabique nasal y afectación grave de un ojo.
El funcionario tras ser atendido por los servicios médicos del centro, tuvo que ser trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en ambulancia. Desde APFP le desean una pronta recuperación de las lesiones producidas.
El sindicato destaca que desde 2004 a 2020 los funcionarios de prisiones han sufrido 6351 agresiones, en Asturias durante ese período se han producido 125 agresiones. Desde APFP se han presentado escritos a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias exponiendo la necesidad de un protocolo y unas medidas preventivas mínimas para garantizar la seguridad y salud laboral de los funcionarios de prisiones para que en la apertura de las comunicaciones no se produciesen hechos como éstos y evitar el contagio masivo de internos y trabajadores del Covid-19, sin que la Secretaría General hiciese ningún protocolo.
El sindicato asegura que esta agresión se podría haber evitado. APFP reclama al Ministerio del Interior el reconocimiento de los trabajadores penitenciarios como agentes de la autoridad; adecuación de los medios coercitivos al siglo XXI con la aprobación de pistolas taser y un incremento de las plantillas para ajustarlas a las necesidades reales de los centros penitenciarios para minorar las agresiones que padecen los trabajadores penitenciarios, así como una actualización retributiva con la equiparación salarial con los compañeros de Cataluña.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios