
El responsable no disponía de seguro ni documentos en regla del animal, lo que supone una infracción muy grave sancionada con 2.404 euros.
Además, el perro no llevaba ni bozal ni cadena (multa de 301 euros), no estaba identificado (otros 301 euros), circulaba sin control (301 euros) y no estaba vacunado (150 euros), según ha informado la Policía Foral.
Comentarios