El estado de alarma ha dejado tiradas a un sinfín de personas que se encontraban fuera de sus hogares y de un día para otro les han cancelado sus vuelos de vuelta sin darles alternativas para volver. En el aeropuerto de Fuerteventura hay cerca de medio centenar turistas españoles que se encontraban de vacaciones y el estado de alarma ha supuesto una odisea para ellos, que no pueden volver a sus casas.

Españoles atrapados por el mundo con la crisis del coronavirus: "No hacemos más que llamar y nadie nos hace ni caso"

"Nosotros volábamos a Madrid el día 18 con Ryanair y nos lo cancelaron, nos dieron la posibilidad de cambiarlo a hoy, 19, y también lo han cancelado. El del 20 también..", cuenta con desesperación una de las afectadas, que ya intentó adelantar su vuelo el pasado día 13, cuando se anunció el estado de alerta. Tampoco entonces lo consiguió.

Barcelona, Sevilla, Asturias, Granada... Los afectados pertenecen a varios puntos de España, pero todos están en la misma situación. "Algunos han intentado volar hasta Tenerife y desde allí a la península con otra compañía. Después de comprar los billetes les han cancelado el que conectaba con la península", denuncia.

El alojamiento y la manutención estos días corre de su cuenta, aunque algunos ya duermen en el aeropuerto porque los hoteles también han comenzado a cerrar. "El mío cierra mañana, pero hay otros que ya lo han hecho. Hay gente con niños durmiendo en el aeropuerto, que cierra a las 23.00 horas pero la Policía les ha dejado quedarse porque no tienen dónde ir". El día 24 cerrará el resto.

CEDIDA POR LOS AFECTADOS

El contacto con las compañías se limita al telefónico, pero las soluciones como cambiar los vuelos se vuelven a convertir en problema cuando vuelven a cancelarlos. Los puestos de atención que permanecen abiertos les derivan a AENA, pero de ellos tampoco han encontrado una respuesta. "Estamos en España y no podemos volver a casa".

"Estamos desamparados por el Gobierno, que ha dado vía libre a las compañías aéreas para cancelar sin ningún tipo de compensación, amparándolas a ellas", lamenta otro de los afectados, sorprendido además por que sí que operen vuelos internacionales y no los nacionales. "Viajan todos los extranjeros porque les repatrían sus gobiernos y a los españoles aquí en nuestro país nos cancelan".

Al temor por quedarse atrapados se suma el de posibles represalias de sus centros de trabajo, ya que tendrán que retrasar su incorporación el tiempo que se alargue esta situación. "Nos han dejado tirados. Se suponía que con el estado de alarma se iban a reducir los vuelos a la península y la realidad es que no se han reducido, se han cancelado".