El fuerte viento que se da este martes en buena parte de la Península Ibérica por el paso de la borrasca Karine ha provocado alerta numerosas provincias, especialmente en la mitad norte, y ha llegado a ocasionar importantes problemas para el tráfico aéreo.

Así, por ejemplo, el aeropuerto de San Sebastián ha permanecido paralizado por varias horas, sin que pudiese operar ningún vuelo, por rachas de viento de casi 125 km/hora, según informa Controladores Aéreos.

En País Vasco se han registrado de hecho los vientos más fuertes de este martes, con 174 km/h en Machicaco y 143 km/h en Leketio.

Igualmente, un vuelo de Iberia procedente de Madrid con destino a Vigo ha tenido que ser desviado al aeropuerto de Santiago de Compostela también a causa de las condiciones climatológicas adversas en la terminal de destino. Desde allí, los pasajeros fueron trasladados a Vigo en un autobús.

Este incidente se ha producido sólo un día después de que otra conexión entre Madrid y Vigo tuviera que cancelarse por el mismo motivo.

Rachas de viento de hasta 143 km/h

También en Galicia, la borrasca Karine ha dejado en las primeras horas de este martes rachas de viento máximas de 143,3 km/h en la localidad de Viveiro (Lugo) y hasta 122,9 km/h en Manzaneda (Ourense).

Al fuerte viento se suma la alerta naranja por el estado del mar, con olas de entre cinco y seis metros de altura en A Coruña y Lugo.

En un nivel más alto, el rojo, se encuentran por oleaje las provincias de Asturias, Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa.

Por otro lado Andalucía, Baleares, Castilla y León y La Rioja se encuentran en alerta amarilla por mala mar, acumulaciones de nieve entre 5 y 10 centímetros y rachas máximas de viento entre los 70 y los 100 km/h.

El lunes se produjeron rachas de hasta 176 km/h

Aún así, la borrasca 'Karine' va amainando y sus efectos durante el martes han sido menores que los producidos este lunes, cuando se llegaron a registrar rachas de hasta 176 km/h en la estación de esquí de Valdezcaray (La Rioja).

Hasta en 14 provincias llegaron a superarse los 120 km/h (lo que se considera "viento huracanado"). Además, y aunque están por debajo de estos valores, se batieron récords históricos de intervalos ventosos en esta época del año en Segovia y Toledo, con rachas de 101 km/h y 96 km/h respectivamente.