Aunque comenzó dando tímidos pasos en su canal de Mtmad –que, por cierto, ya ha abandonado casi por completo–, Alejandra Rubio ha logrado hacerse hueco en los platós principales de Mediaset. Siguiendo los pasos de su abuela María Teresa Campos, su madre Terelu y su tía Carmen Borrego, la joven es ahora una de las colaboradoras de La isla de las tentaciones. Y, si bien es cierto que su debut no acabó de convencer a su madre, Alejandra ha demostrado que de casta le viene al galgo y ya se mueve como pez en el agua en los debates que se originan.

Sin embargo, la felicidad laboral que ha experimentado en las últimas semanas parece que no se corresponde con los asuntos del corazón. La nieta de María Teresa Campos también parece estar sufriendo por amor, pues, según aseguran desde Look, la joven y su pareja, el DJ Álvaro Lobo, están intentando superar una crisis sentimental.

Ninguno de los dos se ha animado, por el momento, a desmentir o confirmar los rumores, que no dejan de crecer con la popularidad de la más joven del clan Campos, quien apenas tiene en Instagram una foto en compañía de Lobo.

Dos años de noviazgo

Aunque el DJ ya pasó la Nochebuena en casa de su suegra –la pareja incluso se animó a bromear con la prensa en un intento por desviar la atención sobre la ausencia de Edmundo en estas fechas tan familiares–, parece que las cosas no han seguido el cauce esperado. Los jóvenes, que acaban de celebrar su segundo aniversario –y viven juntos e independizados desde hace algunos meses–, no se han dejado ver juntos en las últimas semanas. Algo extraño, debido a lo unidos que siempre se han mostrado, que, sin embargo, podría tener que ver con los nuevos compromisos laborales de Alejandra, quien debe pasar muchas horas en los estudios de Mediaset para cumplir para su nueva –pero seguro que fructífera– colaboración con La isla de las tentaciones.