Laura Hernández, la madre del niño asesinado por su padre en Beniel (Murcia) el pasado verano, ha escrito una carta dirigida al rey Felipe VI en la que le pide un cambio en la legislación para que se protejan a los hijos de las víctimas de la violencia machista.
"Al mío nadie lo protegió porque no veían riesgo, no veían que él se había saltado ya una orden de alejamiento y aún así tenía que irse con su padre. ¿A quién tengo que pedir yo responsabilidades?", se pregunta la mujer en la misiva, que reproduce íntegramente La Opinión de Murcia.
El caso del parricida de Beniel conmocionó a la opinión pública el pasado mes de julio. El agresor, con antecedentes por maltrato, acabó con la vida de su hijo Cristian, de 11 años, durante el régimen de visitas. Fue Laura quien alertó a la Policía al cumplirse la hora y ver que no tenía noticias del pequeño.
Tras cometer el crimen, el parricida, David S.O., se quitó la vida ahorcándose. En la carta, Laura le explica al rey que le escribe "desde el dolor más desgarrador que hay: el de que te asesinen a un hijo. Al mío lo asesinó un monstruo, su propio padre. Le escribo en voz mía, y en voz de otras muchas familias, muchísimas, que están pasando por este infierno; pero, sobre todo, en voz de nuestros niños, ya que ellos no pueden hacerlo".
En este sentido, la madre de Cristian le pide al monarca que "como jefe del Estado (...) haga lo que esté en su mano para que la Justicia española cambie: hay leyes que no se cumplen, pero hay leyes que hay que modificar", indica.
"No queremos que, cuando maten a un niño, mujer u hombre, le pongan de condena 20 años y a los 10 ya tengan permisos de salida. Nuestros hijos nunca saldrán de donde están. Exijo también que pongan una mayor protección a los niños inocentes cuando se van con sus padres, al estar separados, y haya denuncias de maltrato y órdenes de alejamiento. Que, por favor, los protejan", prosigue Laura.
En el caso del asesinato de Cristian, sobre el agresor pesaban dos condenas desde junio, una por acoso a su expareja y la otra por quebrantar una orden de alejamiento. Sin embargo, nunca entró en prisión ni se impusieron medidas de protección para los niños porque, tras un test policial, se estableció que el riesgo era medio. Un mes antes del crimen machista, el riesgo de peligrosidad del protocolo nacional de prevención pasó de medio a bajo.
Por último, la madre del pequeño asesinado apela a Felipe VI "como padre", y le pide que "piense en sus hijas y en los hijos de los demás". "No sé si llegará a leerme, lo más probable es que no. Pero, quien lo haga, que traslade desde aquí lo que a usted le pido: un cambio de leyes ya", concluye.
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