La Jesulina medita romper su silencio

  • Carmen Janeiro ha vuelto a ser de interés tras ser inmortalizada con Luis Masaveu.
Carmen Janeiro, en una imagen de 2017.
Carmen Janeiro, en una imagen de 2017.
GTRES
Carmen Janeiro, en una imagen de 2017.

Carmen Janeiro se ha convertido, sin pretenderlo, en uno de los personajes más buscados del mundo del corazón. Alejada del foco mediático por decisión propia, ha vuelto a ser de interés después de que se le inmortalizara con Luis Masaveu, una de las grandes fortunas de este país, surcando los mares a bordo de un impresionante yate. Ocho años después de que iniciaran su relación, los fotógrafos lograban pillarles descubriendo así un romance que era desconocido en la esfera pública.

Me consta que Carmen se quedó muy sorprendida por el interés suscitado y no dudó en telefonear a amigos relacionados con la prensa para pedirles ayuda. No tanto porque se sintiera incómoda por volver a la primera línea de fuego, sino porque acostumbrada a no recibir ningún tipo de estímulo por parte de los periodistas, tuvo que decidir si responder o no a las llamadas en cascada que viene recibiendo desde que todo saltara por los aires: “No hablará porque de momento prefiere seguir en la misma línea, apartada de todo. Pero tiene dos ofertas jugosas para conceder entrevistas”, me aclara una voz autorizada. Tiene una jugosa oferta sobre la mesa.

Si volviera al ruedo tendría demasiados frentes abiertos. La relación que mantiene con algunos miembros de su familia es complicada. Me insisten en que apenas tiene comunicación con María José Campanario y que, aunque siente devoción por su hermano Jesús, se siente cada vez más lejos de él. Tal vez hace bien en desvincularse ahora que, me cuentan, el nombre de Jesulín de Ubrique aparecerá vinculado a alguien demasiado polémico y estridente.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento