El frío ha llamado de nuevo a la puerta de la Península. Lo hace, como es habitual, de formas diversas; por cada clima de nuestro territorio se crea un contexto que influye en la ropa de abrigo, las costumbres, el ocio y, por supuesto, el dinero invertido en calefacción.
En este sentido, la mitad del gasto medio energético en España se destina a calentar los hogares en los meses más fríos, según datos del Instituto Nacional de Estadística, aunque esa cifra suele ser más elevada en el área continental -interior peninsular- y se reduce en áreas como las islas o el territorio mediterráneo. Varía, además, en función del tipo de vivienda. El parque se suele dividir en hogares unifamiliares y plurifamiliares, con distintos sistemas y posibilidades de instalación.
Claves por zonas
Aunque en España existen al menos cinco tipos de clima diferenciados, el Ministerio de Fomento recoge tres principales dentro de su Estudio de la distribución del consumo energético residencial para calefacción en España: el Atlántico-Norte, que abarca el área septentrional; la zona Continental, más extensa y situada en el interior; y la Mediterránea, en el sureste de la Península.
Año tras año, el uso y tipos de calefacción dependen de las características de estos climas. Tal y como recoge el estudio del Ministerio, el área del Atlántico-Norte, con temperaturas suaves durante todo el año, cuenta con un 14,6% de parque de viviendas pero solo un 10,7% del gasto total de calefacción. La zona continental, con un 35,9% de parque residencial, presenta el 50% del gasto de España debido al carácter mesetario, que registra temperaturas extremas e inviernos largos y fríos, en especial en la mitad norte. Por último, la zona mediterránea, con un 49,5% del parque de viviendas, gasta un total del 39,3% en calefacción ya que sus inviernos son más suaves debido a su cercanía a la costa.
En cifras totales, esos porcentajes se traducen en que el consumo promedio de la zona central es un 140% mayor al nacional, con las provincias de León, Soria y Segovia a la cabeza. El frío en España es más notable a medida que el mar se aleja.
Individual, central... ¿qué sistemas triunfan?
España tiene un parque total de más de 17 millones de viviendas, en datos de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat). De ellos, gran parte son hogares en bloque (12 millones, frente a los cinco millones que suman las viviendas unifamiliares).
Sin embargo, aunque en otros países de Europa la presencia de bloques de inmuebles está relacionada con la preponderancia de calefacción central, en España solo un 10% de hogares tiene este tipo de instalación, debido entre otras cosas a que en áreas de clima suave no resulta necesario. Así, el uso de la calefacción central se concentra en áreas como Madrid y otras ciudades de interior.
Un 50% del consumo energético anual en España se dedica a la calefacción
La calefacción individual, por otro lado, reúne el 25% del parque total, y se reparte en las tres áreas climáticas principales, siendo especialmente importante en vivienda unifamiliar.
Los elementos independientes (radiadores, estufas y convectores) están presentes en gran parte de las viviendas, bien como sistema principal o bien como complementario. Por último, destaca el hecho de que el 15% de hogares no cuentan con ningún sistema instalado; de estos, gran parte se sitúan en el Mediterráneo y en Canarias.
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