Irene Junquera se enfrentó al reto de concursar en GH VIP 7 para darse a conocer y salir del estancamiento profesional en el que se sentía. Sin embargo, la experiencia tuvo sus altibajos y tuvo que medicarse para poder continuar en la casa.

La periodista deportiva, conocida por haber sido colaboradora de programas como Zapeando o El chiringuito de Jugones, se expuso en el reality de Telecinco y afrontó un reto difícil para ella pues, además de cambiar drásticamente su papel en televisión, se enfrentó a la casa de Gran Hermano a pesar de padecer claustrofobia.

Según confesó en una entrevista con Lecturas, tomó tranquilizantes para calmar la ansiedad por el encierro y por los conflictos de la casa, muchos de ellos propiciados por Hugo Castejón en las tres primeras semanas de concurso.

"Vino a verme la psiquiatra y me dijo que, si sentía que me ahogaba, lo tomara. Necesitaba estar más tranquila", explicó. "Durante tres o cuatro días sí tuve que tomar un ansiolítico muy flojo".

Pero estas no fueron las únicas revelaciones que hizo Irene Junquera, también habló de su infancia, de los traumas que marcaron su carácter y del tumor benigno que tiene en la cabeza y por el que toma una medicación de por vida.