La delegada del Gobierno en Aragón, Carmen Sánchez, ha explicado hoy que el hombre de 41 años que supuestamente asesinó este miércoles en Andorra (Teruel) a su hijo de 16 años e hirió de gravedad a su pareja y madre del menor, de 39, había mantenido con ella una "fuerte discusión" el pasado martes que llevó a madre e hijo a abandonar el domicilio familiar.

En declaraciones facilitadas por la Delegación de Gobierno, Sánchez precisa que ambos habían regresado ayer miércoles a la casa, donde se produjeron los hechos en torno a las 18.00 horas. El hombre supuestamente asesinó a su hijo con un arma blanca, hirió gravemente a su pareja y después se suicidó arrojándose por la ventana de su vivienda, en un cuarto piso.

Sánchez, quien ha expresado su "profundo dolor e indignación por el crimen machista", ha recordado que Ismael sería el tercer menor asesinado por su padre o pareja de su madre en lo que va de año en España. Ha apuntado también que en este caso no había denuncias previas de maltrato por parte de la mujer y ha pedido a "toda la sociedad" una respuesta unánime de condena. "No puede haber dudas ni palabras disonantes, tenemos que estar todos en lo mismo: defender a las víctimas y arrojar de nuestro lado a los maltratadores y a los asesinos", ha enfatizado.

También el presidente del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, ha mostrado su condena a este crimen machista a través de su cuenta de Twitter. "Ayer Ismael fue asesinado por su padre al tratar de defender a su madre de una agresión machista en Teruel. Tenía 16 años. Un menor muerto, una familia destrozada por el machismo criminal. Mi cariño para la familia y nuestros mejores deseos para la recuperación de Gema, su madre", ha escrito Sánchez.

La delegada del Gobierno traslada también su pésame a la familia por el fallecimiento del joven y su deseo de que la herida, que permanece ingresada "muy grave en la UCI "del hospital Miguel Servet de Zaragoza, pueda recuperarse de las graves heridas causadas por su pareja y padre de su hijo.

En lo que va de año, 38 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas (ocho de los agresores, el 21,1 % había sido denunciado), existe un caso en investigación y 27 niños han quedado huérfanos. La violencia vicaria, en la que un hombre mata a sus hijos o a los hijos de su pareja para hacer daño a la madre, es responsable de 30 asesinatos desde 2013. Desde ese año, 258 menores han quedado huérfanos por culpa de los crímenes machistas.