La nueva vida de Bradley Cooper e Irina Shayk ha comenzado oficialmente tras su ruptura. De hecho, el protagonista de Resacón en Las Vegas fue pillado por los paparazzi cuando se acercaba paseando solo de camino al apartamento que la modelo tiene en la ciudad de Nueva York (Estados Unidos).

Ella, en cambio, fue fotografiada unos minutos después, en el momento en que regresaba a casa con la pequeña Lea metida en un cochito. Madre e hija iban vestidas con trajes con el icónico estampado de la firma Burberry y estuvieron en un parque infantil jugando con la arena y los columpios.

Luego fue a su apartamento donde vio a su ex. Se desconoce cuánto tiempo pasaron juntos, pero es cierto que la relación entre los dos parecen ser excelente, a pesar del fin de su historia de amor.

"Las cosas entre ellos han terminado y buscan la mejor solución para el bienestar de la niña", revelaba una fuente a People el día en que se hacía pública la ruptura. "Están trabajando para ver cómo gestionar la custodia de la niña", continúa la misma fuente.

Por lo pronto, Lea pasó el Día del Padre (en Estados Unidos se celebra ahora, no en marzo como en España) con Bradley quien fue visto bajando de un jet privado desde Los Ángeles a Nueva York, donde se encontró con Irina. Justamente la modelo acaba de regresar de Italia e Islandia, lugares en los que estuvo por trabajo.