"Lo que nos han impuesto, no nos gusta". Así se ha referido Vox a los presupuestos andaluces de 2019 que presentó el pasado viernes el Ejecutivo del PP-A y Ciudadanos, cuya estabilidad se tambalea ante la posibilidad de no sacar adelante las cuentas de este año. Y es que la formación de Santiago Abascal, cuyos votos son imprescindibles para que se apruebe el presupuesto, ha anunciado –en plena vorágine de pactos autonómicos y municipales– que presentará una enmienda a la totalidad al proyecto de Ley para devolver las cuentas al Consejo de Gobierno.

La decisión la han tomado después de estudiar al detalle unos presupuestos que ofrecen muy pocas concesiones a las exigencias de Vox, que había pedido, entre otras cuestiones, que no hubiera partidas ni para la lucha contra la violencia de género ni para la Memoria Histórica. Esta última asciende finalmente a 1,6 millones de euros –100.000 menos que en 2018–, mientras que el presupuesto para la violencia machista se mantiene intacto (4,2 millones).

"No son las cuentas de un Gobierno del cambio, sino continuistas, perfectamente las podrían haber presentado el Gobierno del PSOE-A junto a Cs", ha asegurado el portavoz parlamentario de Vox, Alejandro Hernández, que ha aseverado que no se trata tanto de una cuestión de partidas sino de "espíritu".

Hernández, quien ha indicado que plantearán esa enmienda a la totalidad con propuesta de devolución del texto al Consejo de Gobierno, porque no son las cuentas de un Gobierno del cambio, sino que perfectamente las podría haber presentado el anterior Ejecutivo de PSOE-A.

"Se alejan de todo lo que se decía que se iba a hacer por parte del nuevo Gobierno", según ha sentenciado Hernández, quien ha añadido que la decisión de presentar la enmienda a la totalidad no es tanto una cuestión de partidas y capítulos, sino que es una "cuestión global y de espíritu: A estos presupuestos les falta espíritu de cambio, brilla por su ausencia".

Ha agregado que estos presupuestos no van en ese camino de "cambio de cultura" del que el propio presidente de la Junta, Juanma Moreno (PP-A), ha hablado. "Si estamos trabajando por un cambio real, no nominativo ni superficial o cosmético, habría que empezar desde el minuto uno, por estos presupuestos", ha recalcado.

Después de un análisis pormenorizado del presupuesto, Vox --que tiene un acuerdo de investidura con PP-A-- considera que no se percibe, en modo alguno, un cambio en cuanto a las políticas  que se desarrollaban por parte del anterior Ejecutivo socialista, mientras que sólo se ha llevado a cabo un encaje para cumplir con Europa y con las leyes vigentes a nivel estatal en cuanto a déficit y regla de gasto, según ha indicado el diputado de Vox Rodrigo Alonso.

Cabe recordar que el PP-A y Cs suman solo 47 de los 109 escaños del Parlamento andaluz, por los 50 que suman el PSOE-A y Adelante Andalucía. Los 12 votos de Vox son necesarios para que el bloque de la derecha alcance los 59 y sume mayoría.

"Nosotros hemos venido a cambiar políticas y no a cambiar los números", según ha sentenciado Alonso, para quien hay que cambiar las formas de hacer política y un Gobierno que dice ser del cambio "no puede poner encima de la mesa unos presupuestos donde sólo cambian las cifras". Ha insistido en que su formación es contraria a destinar dinero de los ciudadanos a actividades o programas que no tienen un claro objetivo de interés público y social.

Ha añadido que no estaremos ante unos presupuestos del Gobierno del cambio si no se contienen medidas en favor del empleo, o para acabar con la "estructura paralela y la duplicidad administrativa" que tiene la Junta. "No hemos venido aquí a seguir haciendo lo mismo, sino a cambiar la política", según ha sentenciado.

También se ha pronunciado el parlamentario Manuel Gavira para señalar que los presupuestos que el Ejecutivo de PP-A y Ciudadanos ha presentado no son los de un Gobierno que se "dice del cambio, sino que es una continuación de los presupuestos del PSOE-A".

Lo que se pretende es, según ha recalcado, que haya unos presupuestos que realmente cambien políticas y ha añadido que si el Ejecutivo modifica y hay un cambio real de partidas presupuestarias, ya volverían a analizar el contenido de ese posible cambio.

"Lo que nos han impuesto, no nos gusta", según ha sentenciado Gavira, quien ha señalado que lo que tendría que hacer ahora el Gobierno es intentar atender a las medidas que PP-A y Vox pactaron en su acuerdo de investidura. Si no fuera así, según ha añadido, ese acuerdo no serviría "para nada y nosotros no estamos para eso, sino que hemos venido aquí a cumplir los compromisos que hemos firmado".

"Si no se aceptan y no se cumplen, utilizaremos todas las armas que nos permite el Reglamento del Parlamento andaluz para que nuestros acuerdos se cumplan", ha indicado Gavira, quien ha añadido que el Gobierno de PP-A y Cs tendrá que negociar con Vox, apuntando que aquí "no hay dos gobiernos", sino un sólo Gobierno de dos partidos.

"Tendrán que negociar con nosotros y hacer cumplir los acuerdos que hemos firmado", según ha recalcado el diputado de Vox, quien ha recalcado que esperan un "gesto del Gobierno que se dice del cambio para intentar cambiar un poco las políticas en Andalucía".

El líder de Vox en Andalucía, Francisco Serrano, ha ido un poco más allá y ha afirmado que no apoyarán las cuentas sin que exista una negociación formal con el PP-A y Cs, lamentando el «ninguneo» por parte de los dos socios de Gobierno.

Por su parte, el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, ha reprochado a Vox que los presupuestos de Andalucía, pactados por el PP y su formación, puedan no salir adelante por la enmienda a la totalidad, ya que sus votos son imprescindibles para que se aprueben las cuentas.

En rueda de prensa tras la reunión de la Ejecutiva de Ciudadanos, Villegas ha añadido que "cada uno es responsable de sus votos", una declaración con la que también ha aludido a PSOE y Podemos, quienes también tendrán que decidir "si echan atrás o no" las cuentas andaluzas.

"Precisamente, Andalucía es un ejemplo paradigmático porque Vox es tan influyente que ha puesto una enmienda en contra de los presupuestos y si eso sigue adelante será responsable de que los presupuestos que pretenden acabar con los chiringuitos, bajar los impuestos, mejorar la natalidad, la sanidad y la educación puedan no salir", ha dicho Villegas al ser preguntado por la posible influencia de Vox en los gobiernos autonómicos.