Los vecinos de El Prat de Llobregat se sienten "confusos": "Nadie sospechaba de él", cuenta uno de los lugareños a través de una llamada telefónica a 20minutos. Se refiere a Aitor García, el hombre que presuntamente asesinó a Janet Jumillas, de 39 años y cuya pista se perdió el 13 de marzo. En este municipio barcelonés encontraron este martes el cadáver de una mujer, oculto por la maleza en un agujero de un descampado. Los Mossos han confirmado que el análisis de las huellas dactilares ratifica que se trata del cuerpo de Jumillas. Horas antes de que se confirmara su identidad, el abogado de la familia de la víctima ya pronosticaba que era ella. El cadáver llevaba su ropa.

El presunto autor del crimen, que se encuentra en prisión provisional desde el 9 de mayo, solía frecuentar el paraje donde se halló el cuerpo: "Le conocía de haberle visto pasear al perro por la zona donde justo se ha encontrado el cadáver, pero nadie sospechaba nada de él". En ese descampado es "donde pasea casi todo el mundo a sus perros", pero el punto en el que ha sido hallado el cuerpo está delimitado por una valla, pues antiguamente era la zona por la que se entraba a la Fábrica de la Seda. "El cadáver estaba en la parte donde antes se encontraba la fábrica. Los que pasean a sus perros no suelen saltar la valla, aunque ahí va muchas veces la gente joven para estar a la sombra de los árboles".

Los que encontraron el cuerpo fueron unos operarios de obras. Según han confirmado fuentes de Adif a este periódico, el terreno es propiedad del Grupo Inmobiliario Vertix. Los vecinos del Prat vieron máquinas trabajando en esa área el martes desde las 9.00 de la mañana, así como a gente desbrozando la maleza que abunda en la zona. Sobre las 17.00 de la tarde fue cuando encontraron el cuerpo, y hasta allí se trasladaron los Mossos d'Esquadra.

El sospechoso, antes de mudarse a Cornellà, había vivido toda la vida en El Prat, concretamente en el barrio de Sant Cosme, "un sitio muy conocido por aquí porque hay muchas familias gitanas". De ese mismo barrio es Cristian K., acusado de encubrir el crimen y puesto en libertad provisional. Los mossos pillaron in fraganti a ambos el 21 de marzo –8 días después de que desapareciese Janet– saliendo de la casa de Cornellà de Aitor para tirar varias bolsas de basura. La extraña actitud de ambos, que parecían asegurarse de que nadie les veía deshaciéndose de los residuos, llamó la atención de los agentes, que posteriormente comprobaron el contenido que habían arrojado al contenedor: tres mochos de fregona manchados con sangre de Janet, el vidrio de unas gafas del mismo modelo y graduación que las que de la víctima, una cuerda con pelos y unos guantes de látex. Posteriormente, cuando acudieron al domicilio del presunto asesino, encontraron sangre tanto en las paredes como en el suelo. Además, una parte del piso tenía pintura reciente.

En el descampado donde encontraron el cadáver, antaño se alzaba la famosa Fábrica de la Seda, construida en 1927 e impulsora de la industrialización del Prat. En la actualidad, únicamente queda en pie la antigua chimenea. No muy lejos de esa torre de ladrillos fue donde unos operarios de obras encontraron el cuerpo de la víctima.