La madre de la niña de cuatro años que el pasado sábado ingresó en la UCI del Hospital Infantil de Zaragoza declaró ante la juez de guardia que su pareja había agredido a su hija porque esta no paraba de llorar.

Según publica Heraldo, el detenido, Constantin M., de 30 años, negó en un primer momento haber golpeado a la pequeña y sostuvo que la niña se había caído en la bañera, mientras que la madre, también en la cárcel desde este martes, alegó que la caída se había producido desde la cama. Ante las versiones contradictorias, la jueza envió a los dos detenidos a prisión.

La madre, Elena Y. L. de 35 años, confesó que su novio se levantó de madrugada porque la niña estaba llorando y la emprendió a golpes con la pequeña hasta que la dejó sin sentido. Sin embargo, posteriormente, restó importancia a lo sucedido y dijo que le había dado "una patada".

Fue la madre quien llamó a la ambulancia porque su hija estaba inconsciente. Mientras llegaban los sanitarios prepararon una versión de los hechos que sin embargo luego les delató.

Según ha podido saber Heraldo, la pareja de la madre explicó que se levantó de la cama a oscuras y que, como no veía nada, lanzó una patada y le dio en la cabeza. Confesó igualmente que esa noche había bebido y consumido marihuana.

De la investigación iniciada por la Policía se desprende también que la madre, de inteligencia límite, había sufrido malos tratos también por parte de su actual pareja, con la que mantiene una relación desde hace aproximadamente un año, pero no había denunciado. Los forenses, además, habrían apreciado en la pequeña alguna lesión anterior. El hombre tiene antecedentes policiales por violencia de género.