La Manada usaba la placa del guardia civil para robar droga a otros jóvenes y consumirla ellos

Los cinco miembros de La Manada sonríen en un selfie realizado en el interior de un coche.
Los cinco miembros de La Manada sonríen en un selfie realizado en el interior de un coche.
Vídeo ATLAS
Los cinco miembros de La Manada sonríen en un selfie realizado en el interior de un coche.

El programa Equipo de investigación de La Sexta ha revelado este viernes cómo actuaban los miembros de La Manada al acceder a mensajes del conocido grupo de Whatsapp, en los que el Prenda reconocía el uso que hacían de la placa del guardia civil. "Le quitamos a unos notas la coca con la placa. Medio gramo de cocaína", se puede leer en uno de ellos.

Según los mensajes, el grupo se valía de esta treta no solo para robar droga y luego consumirla, sino también para no pagar y llevarse bebidas de bares y casetas de feria.

El reportaje ahonda en el caso de Pozoblanco, que ocurrió en abril de 2016, meses antes del de Sanfermines, pero se descubrió posteriormente después de que el guardia civil de La Manada entregase su móvil ante la Policía Foral de Pamplona.

Los agentes descubrieron entonces vídeos y fotografías de presuntos abusos a una joven de 21 años que iba montada en un coche con los miembros de La Manada. En este sentido, Equipo de Investigación ha reproducido las declaraciones de la chica ante el juez, que ha contado cómo conoció a Alfonso (Cabezuelo, el militar) durante una noche de fiesta en Torrecampo, cerca de Pozoblanco (Córdoba).

"Allí conocí a Alfonso, él estaba bailando y tomando copas con otros cuatro amigos. Uno de ellos era un guardia civil al que yo conocía de haberlo visto alguna vez por el pueblo. Sobre las siete de la mañana salí de la fiesta con mis amigos. Alfonso se acercó a mí y me ofreció llevarme en coche a casa y yo accedo", ha indicado la víctima.

A partir de ese momento, la joven ha reconocido que tiene "una laguna, no recuerdo absolutamente nada". Cuando recuperó la consciencia, al llegar a Pozoblanco, ha descrito que "estaba en el asiento de atrás del coche, desnuda, completamente, con las medias rotas y Alfonso iba conduciendo". Cuando empezó a vestirse, ha proseguido, se pasó al asiento del copiloto. "Recuerdo que Alfonso me dijo 'chúpamela', yo me negué, él me pegó en la cara y en el brazo y me echó del coche gritándome 'puta".

El programa que presenta Gloria Serra ha mostrado también algunas de las imágenes en las que se ve a Cabezuelo besando a la joven, cuya cara permanece oculta, mientras él posa y mira directamente a cámara. Sin embargo, el militar de La Manada obvia en su declaración ante el juez lo que pasó en ese coche donde presuntamente se abusó de la joven.

Asimismo, el psiquiatra forense José Carlos Fuertes ha analizado para el programa las conversaciones de Whatsapp del grupo, sobre quienes ha resaltado que "son individuos con una moralidad inexistente". "Hablan de actividades delictivas importantes y lo hablan con una frivolidad absoluta, de una manera totalmente cotidiana", agrega Fuertes.

Por su parte, el abogado de los cinco miembros de La Manada, Agustín Martínez —este viernes se conocía que Jesús Pérez, el letrado del guardia civil, renunciaba a su defensa— ha sostenido en una entrevista en ese mismo programa que la grabación de Pozoblanco, la prueba fundamental de la causa, "se obtuvo de manera ilícita" al haber llegado a ella después de que el guardia civil entregara de forma voluntaria el móvil tras ser detenido en Sanfermines.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento