La presentadora de Espejo público, Susanna Griso, se enfrentó este jueves en directo a un okupa, de nombre Obed, que intervenía en el programa matinal de Antena 3 TV. Griso le reprochó su comportamiento cuando el hombre mantenía un cara a cara con el propietario de la vivienda que estaba ocupando: "Perdóname, Obed, pero te tengo que decir que tu discurso flaquea, hace aguas por todas partes", le dijo la presentadora. "Si tú tienes una situación desesperada, con tus hijos en la calle, hombre, no te vayas a un casoplón, que además tiene propietario", añadió.

Antes, Ángel, el dueño de la vivienda (un amplio chalet con piscina, situado en Vilasar de Dalt, Barcelona), había contado que encontró a Obed ocupando su casa al volver de unas vacaciones, añadiendo que tuvo que recorrer varias comisarias de los Mossos d'Esquadra para que la Policía atendiese finalmente su caso. Según se explicó en el programa, Ángel utiliza el chalet como segunda residencia, y pasa allí los fines de semana y también algunos días entre semana.

Ángel señaló que, al saber que habían ocupado su vivienda, intentó convencer a los okupas (Obed y toda su familia) de que la abandonaran, antes de recurrir a denunciarlos, pero que Obed se negó, alegando la difícil situación familiar en que se hallaba. "Con un par", comentó entonces Susanna Griso desde el plató.

A continuación, Obed, que se encontraba frente a la vivienda junto a Ángel y a una reportera del programa, pidió comprensión a los espectadores, explicando que había sido desahuciado de la casa donde residía anteriormente, y que necesitaba un lugar donde vivir junto a su familia (su pareja, su madre y dos hijos) y dos perros, porque no le era posible alquilar nada. "Lo he intentado de mil y una maneras, pero no me aceptan, porque no tengo residencia, ni un buen contrato, ni una buena nómina" dijo.

Obed contó entonces que, "por pura supervienvia", había pagado a una "mafia" para que le encontrasen una vivienda, y que desconocía que la casa estaba habitada. "Me dijeron que era del banco", indicó. En ese momento intervino Griso, haciéndole notar que ahora ya sabía que la casa sí tenía propietario, y preguntándole que por qué no se iba. "Me veo en esta situación bochornosa", admitió Obed, "pero por un hijo uno es capaz de hacer lo que sea, no me voy a ir a la calle", añadió.

Según relató el mismo, Obed vivía anteriormente de alquiler en otra casa aún mayor, "hace cuatro años". Fue entonces cuando Griso, tras decirle que su discurso flaqueaba, le espetó:  "Si tú tienes una situación desesperada, con tus hijos en la calle, hombre, no te vayas a un casoplón, que además tiene propietario, y que lo tienes al lado, desesperado". "No se tiene que desesperar, yo ya le dije que no más tenga donde meterme legalmente, yo me voy", respondió Obed. "A mí me llaman y me dicen 'te doy un piso, vente para acá', y yo me voy ya", dijo.