Ben Stiller, de 52 años, es uno de los más populares actores del momento. Le conocemos por haber protagonizado películas como Algo pasa con Mary, Una noche en el museo o Zoolander. A partir de ahora, la estrella de Hollywood va a ser conocida y puede que vista en algunos de los rincones más olvidados del planeta.

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha nombrado a Stiller embajador de buena voluntad del organismo. El anuncio coincidió con el fin de un viaje del actor a Guatemala de la mano de ACNUR, en el que se reunió con refugiados, incluyendo niños no acompañados, y fue testigo del trabajo que hace sobre el terreno la agencia humanitaria.

El actor, director y productor estadounidense tuvo la oportunidad de conocer a hombres, mujeres y niños procedentes de Centroamérica que se han visto obligados a huir de sus hogares por la violencia perpetrada por organizaciones criminales y bandas.

Stiller, que se mostró honrado de ocupar este cargo simbólico, sostuvo que con más de 68 millones de desplazados en el mundo "no ha habido un momento mejor para ser solidarios con ACNUR y ayudar a los refugiados".

"Haré todo lo que pueda como embajador de buena voluntad por esta organización, para defender a los refugiados y animar a otros a hacer lo mismo", agregó.

Por su parte, el alto comisionado de Naciones Unidas para los refugiados, Filippo Grandi, se mostró convencido de que el actor será un buen representante. "He sido testigo personalmente del compromiso de Stiller con los refugiados y su capacidad extraordinaria de hablar de un tema tan complicado como el desplazamiento de personas de forma clara, apasionada y convincente", manifestó Grandi.

El alto comisionado recordó que su principal papel es el de "despertar consciencias, conseguir apoyos y dar voz a aquellos que se han visto obligados de huir de sus casas".