El Govern ha retomado este martes en la reunión semanal del Consell Executiu la compra de urnas para el referéndum del 1 de octubre en su primera reunión con los tres nuevos consellers Jordi Turull, Joaquim Forn y Clara Ponsatí, y el nuevo secretario del Govern, Víctor Cullell.

Como medida preventiva, el Govern no explicará los detalles de cómo y cuándo se comprarán las urnas porque, según el nuevo portavoz Jordi Turull, "vivimos en un Estado de asedio y gestionaremos la información cuando lo consideremos mejor".

De momento, el Gobierno catalán ha aprobado un decreto que traspasa la competencia en 'proceso electorales y consultas populares' al Departamento de Vicepresidencia que lidera Oriol Junqueras (hasta ahora dependía de la Consejería de Gobernación).

El nuevo portavoz del Govern y conseller de Presidencia, Jordi Turull, ha explicado que, una vez aprobado este decreto, el Govern empezará a analizar y compartir los varios itinerarios para adquirir esta urnas, que no ha precisado, y ha asegurado que todo este proceso será "dentro de la ley y la legislación vigente".

Según explicaron el pasado viernes el presidente Carles Puigdemont y el vicepresidente Oriol Junqueras, el primer paso previsto para reactivar la compra de urnas mediante un acuerdo de Govern por el cual el área de procesos electorales de la Generalitat pase del Departamento de Gobernación al de Vicepresidencia.

Oriol Junqueras y Raül Romeva serán los dos consellers encargados de la compra de urnas aunque será una decisión "colegiada" de todo el Govern a la que la Fiscalía podría responder de forma inmediata con una querella por prevaricación, desobediencia y malveración de fondos, como ya ocurrió con la consellera de Governaicó, Meritxell Borràs, cuando inició los trámites del concurso para adjudicar las urnas.

El concurso fue declarado desierto el pasado 27 de junio porque, según el Govern, ninguna de las dos empresas licitadoras superó los trámites.

Una vez el área de procesos electorales sea competencia de Vicepresidencia y no de Gobernación, la conselleria de Oriol Junqueras deberá definir los nuevos pasos para la compra de urnas, además de otros elementos como la papeletas.

Mientras el Govern inicia los trámites para la compra de urnas que permita el desarrollo del referéndum del 1-O, el otro foco se sitúa en el Parlament donde la Mesa y la Junta de Portavoces han aprobado el orden del día del pleno del próximo miércoles y jueves 26 y 27 de julio que será el último de este periodo de sesiones antes de las vacaciones de verano.

Los grupos de JxSí y de la CUP han introducido en el orden del día la proposición de ley de reforma del reglamento de la Cámara con la que quiere aprobar las 'leyes de desconexión' por la vía más urgente, y en lectura única. Una decisión que quedará pendiente del Consejo de Garantías Estatutarias, órgano consultivo y no vinculante que en su última decisión tumbó por unanimidad utilizar el mecanismo de lectura única.

Así el Parlament aprobará la próxima semana la reforma del reglamento y esto querrá decir que se habilita el inicio del periodo de sesiones a partir de 15 de agosto para poder cumplir con los plazos de convocatoria del referéndum.

A finales del mes de este mes de julio además está previsto que se dé a conocer la ley de transitoriedad jurídica que marca el tránsito de la Cataluña autonómica a la republica catalana independiente.

El día 6 de septiembre se podría aprobar la ley de referéndum en el pleno del Parlament por lectura única. Según lo previsto por los partidos independentistas, el proceso sería introducir el punto en el orden del día sin aviso previo ya que lo permitirá la Ley de reforma del reglamento del Parlament que se habrá aprobado en julio. Se podrá entrar en el orden del dia a petición de un solo grupo parlamentario y no por la totalidad como ocurre ahora.

Según el calendario para la independencia, el mismo día 6 se podrán elegir por mayoría absoluta los 5 miembros de la Sindicatura Electoral de Catalunya entre un grupo de juristas y politólogos que propondrán JxSí y la CUP según la ley de referéndum que presentaron el día 4 de julio los grupos independentistas ya que el resto de grupos del Parlament se ha declarado contrarios a esta ley y por tanto no harán propuestas.

Si la ley de referéndum se aprueba el día 6 de septiembre el gobierno de Rajoy tardará unas horas en presentar un nuevo recurso ante el TC que en el plazo de uno o dos días estará suspendida. La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría aseguró que "al Estado le bastan 24 horas para paralizar la ley de referéndum".

Toda esta tramitación se producirá justo unos días antes de la Diada del 11 de septiembre para la que las asociaciones independentista ya están organizando los actos. La concentración se realizará en Barcelona en el cruce de paseo de Gràcia con la calle Aragó y tendrá forma de cruz para simbolizar la suma de todo el mundo. La proximidad del referéndum del 1-O y la reacción del Estado marcarán el desarrollo de la Diada.

Para que la convocatoria de referéndum sea oficial se necesita el decreto del Govern. Por ello en la reunión semanal del Consell Executiu del 12 de septiembre está previsto que el Govern apruebe la convocatoria de referéndum. Todo apunta que también será una decisión colegiada a la que se dará la máxima solemnidad.

Con todos los trámites superados, el 15 de septiembre empezarán los quince días de campaña que prevé la ley catalana del referéndum.

Mientras en Cataluña se irán sucediendo las tramitaciones hacia el referéndum del 1 de octubre, el Tribunal Constitucional (TC) realiza esta semana el último pleno antes de las vacaciones de verano, el conocido como pleno escoba, donde se cierran los flecos que han quedado pendientes.

Pero, al igual que los diputados del Parlament, los magistrados del TC tienen la orden de no marchar muy lejos de vacaciones para estar operativos a partir el 15 de agosto por si el Parlament aprueba la ley de transitoriedad o del referéndum y el Gobierno presenta recurso.

En ese momento, el TC podrá suspenderlas por la vía de urgencia en 24 horas y dejarlas sin efecto.