Cerca de 27.500 migrantes llegaron a las costas de Italia durante el pasado octubre, lo que supone la cifra mensual más alta registrada hasta el momento en el Mediterráneo central y más del doble que en septiembre, según informó la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex).

La principal causa de este "incremento sin precedentes" fue el buen tiempo, que llevó a los traficantes de personas "a amontonar a los migrantes en embarcaciones no aptas para la navegación con el objetivo de aprovechar las buenas condiciones climatológicas", dijo la agencia, con sede en Varsovia.

La mortalidad durante la ola migratoria registrada el mes pasado "ha sido elevada", con 127 ahogados recuperados en la región del Mediterráneo central, aunque probablemente el número de muertos sea mayor, según Frontex.

"Estamos trabajando estrechamente con las autoridades italianas para aumentar el apoyo de Frontex en los puntos de acceso para el registro, comprobación de nacionalidad y retorno eficiente de los migrantes que no tienen derecho a permanecer en la UE", aseguró el director de Frontex, Fabrice Leggeri.

Leggeri explicó que la agencia participa en la operación Sophia de la Unión Europea en "tareas de entrenamiento a la Guardia Costera libia y ayuda para desarrollar la capacidad de control fronterizo de las autoridades de este país norteafricano".

En lo que va de año, cerca de 159.500 refugiados e inmigrantes llegaron a Italia, en su mayoría ciudadanos eritreos y nigerianos, un 13% más que en el mismo periodo de 2015.

Mientras tanto, el número de llegadas a las islas griegas en el Egeo Oriental se mantiene muy por debajo de las cifras de hace un año, y en octubre se detectaron alrededor de 3.100 personas, en su mayoría sirios, iraquíes y afganos, un número similar al registrado en el mes anterior. Durante los primeros diez meses de este año llegaron hasta las islas griegas unos 170.000 migrantes, aunque la mayor parte de las llegadas se produjeron entre enero y marzo.

La ruta migratoria de los Balcanes Occidentales tuvo en octubre un descenso similar, con 1.700 interceptados, menos del 1% de la cifra registrada en el mismo periodo de 2015, y en su mayoría procedentes de Afganistán, Pakistán e Irak.

Precisamente este miércoles, la Guardia Costera de Italia rescató a cerca de 580 migrantes en el Mediterráneo central, en el marco de cinco operaciones de socorro. Las autoridades señalaron que viajaban a bordo de cuatro lanchas de goma, una de las cuales estaba semihundida, y una pequeña embarcación de madera.

Durante esas operaciones los guardacostas recuperaron el cadáver de una persona. Según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones, hasta mediados de octubre se habían perdido más de 4.220 vidas en el Mediterráneo, frente a los 3.800 muertos registrados en todo 2015.