El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, defiende este martes en el Pleno del Congreso el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2016, que se enfrenta a trece enmiendas de totalidad presentadas por todos los partidos de la oposición —con la única excepción de UPN, socio electoral del PP— pidiendo la devolución del texto al Gobierno.

El debate ha arrancado a las doce del mediodía con la intervención del ministro, que ha afirmado que el Gobierno en esta etapa, "intensa y difícil", ha tomado medidas que han mejorado la vida de los españoles y han abierto las puertas "de par en par" a un futuro con más progreso y más bienestar. El ministro ha destacado que ahora se abre un "abanico" con amplísimas oportunidades de futuro y ha pedido aprovecharlas y respetar la coherencia de los planteamientos gubernamentales.

El ministro asegura que las cuentas para el próximo año se han hecho para no defraudar a la sociedad, frente a las "utopías inalcanzables" que plantean otras formaciones que no tienen responsabilidad de Gobierno. "Frente a los que ofrecen meras teorías, en la práctica no hay Presupuestos mas sociales que los que apuestan por crear empleo", ha dicho el titular de la cartera de Hacienda.

Asimismo, ha afirmado que estos son los Presupuestos que necesita España y su economía, al tiempo que ha dicho que son una garantía de lucha contra la desigualdad y que "en la práctica, no hay Presupuestos más sociales que aquellos que apuestan por crear empleo".

El secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, ha sido el primero en replicar la intervención del ministro. Según Sánchez es una "desfachatez" y "un atropello democrático imponer las cuentas para el próximo año antes de escuchar a los españoles en las elecciones". Sánchez ha añadido que el Gobierno no ha traído las cuentas para 2016, sino "un programa electoral".

El líder de los socialistas ha espetado a Rajoy que "le ha faltado gallardía" para defender "personalmente" las cuentas ante el Congreso. La tradición, sin embargo, es que sea el titular de las cuentas quien protagonice este debate pese a que el PSOE quería que fuera el presidente dado lo "excepcional" de tramitar el proyecto de ley en pleno verano para dejarlo aprobado antes de la disolución de las Cortes por la convocatoria de elecciones.

El socialista se ha preguntado cuál es la "emergencia nacional" que ha llevado a tramitar los Presupuestos en agosto y, entre otros temas, ha ironizado sobre si se debía a que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, había dimitido por su reunión con el exvicepresidente Rodrigo Rato, o si el PP iba a explicar la trama de corrupción que le afecta.

Ha respondido que no se debe a nada de esas cuestiones, sino que, en su opinión, Rajoy trata de "aferrarse hasta el último minuto al poder" y antepone sus intereses a los de la ciudadanía. Sánchez ha afirmado que lo "decente", lo "coherente" y lo "democrático" era adelantar las elecciones para que el próximo Gobierno elaborara libremente sus presupuestos.

"Usted es un peligro para la economía porque ha llevado a España a una grave degradación institucional con su partido corroído por la corrupción sin que nadie asuma responsabilidades", ha añadido el dirigente socialista. "Usted ha sido el hombre de la troika en España y, una vez cumplido ese mandato, el drama es que usted ya no sabe qué hacer con la economía", ha añadido.

"Es usted quien amenaza la recuperación económica", le ha replicado posteriormente Montoro. El ministro de Hacienda ha destacado que los ejes que ha expuesto Sánchez para mejorar la evolución de la economía son "vaguedades" y ha incidido en que el anterior Gobierno socialista dejo endeudada España "hasta las cejas". El ministro ha preguntado a Sánchez que si le van a permitir o le van a inducir sus socios potenciales [en referencia a Podemos] a cambiar los Presupuestos como ha asegurado en su discurso.

Por primera vez, los nacionalistas catalanes de Convergència (con Pere Macias) y Unió (Josep Sánchez Llibre) presentan una enmienda cada uno. Ambas formaciones coinciden en que las cuentas del año próximo son "antisociales". Los dos grupos han arremetido contra los Presupuestos porque son "triunfalistas" y "propagandísticos", además de "insolidarios" e "injustos" que "maltratan" a los ciudadanos catalanes.

Macías ha afirmado que las cuentas para 2016 no han sido diseñadas para el bien de la sociedad, sino "pura y simplemente" para los intereses electorales del PP. Además, ha dicho que los PGE son "antisociales" porque desprecian la cultura y ha asegurado que son unas cuentas "obsesionadas" con la centralización, ya que las partidas que suponen un aumento de las competencias estatales reciben "generosísimos incrementos".

Macías ha afirmado que se trata de unos "pésimos presupuestos" para Cataluña y ha mencionado, entre otros temas, la "miserable" inversión del 8% en carreteras y los retrasos contemplados en el corredor mediterráneo. Además, ha afirmado que el Gobierno utiliza los PGE "como un arma electoral" contra Cataluña y ha apuntado que el PP "está castigando a siete millones y medio de ciudadanos".

Por su parte, Sánchez Llibre ha dicho que los Presupuestos son "de baja intensidad y calidad democrática", por su tramitación adelantada, y ha añadido que son unas cuentas muy desleales, injustas e insolidarias con Cataluña. Cree que agravan "todavía más" y profundizan las tensas relaciones entre Cataluña y España y ha puesto como ejemplo que el nivel de inversiones productivas en esta comunidad autónoma se situará en el 10,7% cuando su contribución al PIB español asciende al 19%.

También se ha preguntado retóricamente cómo pretende el Gobierno español alcanzar sus objetivos económicos si "castiga" a Cataluña, que es "la locomotora económica" de España. Sánchez Llibre ha criticado además que el Ejecutivo no haya presentado un nuevo sistema de financiación de las autonomías mientras sí ha incluido en los presupuestos la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) que "recentraliza" el estado de las autonomías.

Durante su turno, el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, ha criticado "el rumbo suicida" de la política económica del Gobierno, ya que las políticas del PP han aumentado la desigualdad entre ricos y pobres y entre hombres y mujeres.

Así, ha dicho que las cuentas del Gobierno son una "fantasía" y que son los números del "liberalismo existente", que socializa las pérdidas y privatiza las ganancias. Ha preguntado al Ejecutivo de qué habla cuando habla de recuperación, ya que en su opinión no son lo mismo las multinacionales que la mayoría social que "está sufriendo de forma dramática" las consecuencias de la crisis y su gestión neoliberal.

Según Garzón, la "falsa recuperación" económica de España se basa en la repetición del mismo modelo ya que el "pequeño incremento" del empleo se está registrando en sectores como la hostelería, la restauración o el sector inmobiliario, por lo que no se ha aprovechado los PGE para cambiar el modelo productivo.

Ha afirmado que el problema de España es que tiene un economía de bajo valor añadido y le ha dicho al Gobierno que "jugar a las mismas cartas" que China, compitiendo por la vía de los bajos salarios, es una apuesta muy arriesgada que está encaminada al fracaso.

Además, ha dicho que no el PP no ha creado empleo sino que lo ha "desguazado", ya que donde antes había un trabajador con derechos ahora hay dos sin ellos. "La figura del trabajador pobre es algo normal en este país", ha añadido Garzón. Ha criticado al Ejecutivo por acabar con el principio de sanidad universal así como por no destinar más dinero a la inversión y el desarrollo.

Por su parte, el también diputado de la Izquierda Plural Joan Coscubiela, ha señalado que los PGE son "falsos desde sus cimientos" y ha acusado al PP de dejar la Seguridad Social en "riesgo" por su despreocupación por aumentar los ingresos. Ha señalado que solo 55 de cada 100 parados reciben prestación por desempleo y que en 2016 se van a dedicar a políticas activas de empleo el 30% menos que en 2011.

Además, Coscubiela ha dicho que los PGE son doblemente antisociales porque asfixian a las instituciones locales y autonómicas y además suponen "un verdadero ataque" al estado social. Por ello, ha pedido al Gobierno que "deje de mentir y engañar" pero ha considerado que es una petición "ingenua", porque en su opinión solicitarle eso al PP es como pedirle "a un escorpión que deje de inocular veneno: va en su naturaleza"

En el turno de UPyD, Rosa Díez ha acusado al Gobierno de usar los Presupuestos de 2016 para "camuflar" las "miserias" de una legislatura de engaños y ha añadido que son unas cuentas "fracasadas" de un Ejecutivo "fracasado" que intenta resolver así sus problemas electorales.

Díez ha afirmado que las cuentas del Gobierno "son inútiles" para resolver los problemas de los españoles y ha dicho que UPyD no apoyará unos presupuestos "propagandísticos" y que son "una burla" para los que más han sufrido.

Según Díez, el Gobierno ha consumido un 60 % del Fondo de Reserva de Seguridad Social y ha previsto que a este ritmo se agotará en 2018.

El debate continuará el miércoles por la mañana con Pedro Azpiazu, portavoz económico del PNV y el Grupo Mixto, en el que defenderán sus enmiendas de totalidad Amaiur, ERC, BNG, CC-NC, Compromís-Equo, Foro y Geroa Bai. Todos ellos critican los recortes del Ejecutivo.

Aunque es el único diputado que no ha presentado enmienda de totalidad, en ese mismo turno del Grupo Mixto fijará posición Carlos Salvador, de UPN. Y cerrará el portavoz de Presupuestos del Grupo Popular, Jaime de Olano. Es previsible que Montoro cierre el debate con una última reflexión general, como ha hecho en años anteriores.

Una vez rechazadas todas las enmiendas de totalidad —gracias a la mayoría absoluta de los 'populares'—, el plazo de presentación de enmiendas al articulado permanecerá abierto hasta las 14.00 horas del viernes. En este trámite todos los grupos parlamentarios, incluyendo UPN, presentarán sus ideas para mejorar las cuentas, que la Ponencia del Presupuesto debatirá la próxima semana.

Entre el 7 y el 11 de septiembre, la Comisión de Presupuestos que preside el socialista Enrique Serrano revisará las enmiendas parciales que queden vivas e irá aprobando los diferentes capítulos del Presupuesto, para que el dictamen pueda ser elevado al Pleno. Allí, los ministros irán defendiendo las cuentas de su departamento del 14 al 16 de septiembre, en una sesión plenaria que concluirá con las votaciones y el mandato de remitir el texto resultante al Senado.

la previsión es que la Cámara Alta deje finiquitados los Presupuestos en la semana del 13 al 15 de septiembre, un mes después de recibirlos, y cualquier modificación que se haya introducido en el Senado deberá ser ratificada por el Congreso, lo que ocurrirá previsiblemente en un Pleno que se celebrará el jueves 22 de octubre, dejando así aprobados los Presupuestos de 2016 antes de la disolución de las Cortes por la convocatoria de elecciones generales.