Centenares de personas, unas 500, se han concentrado este martes a mediodía ante la sede del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) con el formulario 'de autoinculpación' a punto para presentarlo a las instancias judiciales por su participación en la votación del 9-N. Se han podido inculpar unas 150 personas y se han hecho colas de más de dos horas de espera.

Es una nueva acción que ha organizado la Asamblea Nacional Catalana para mostrar el apoyo al presidente de la Generalitat, Artur Mas, la vicepresidenta Joana Ortega y la consellera de Educació, Irene Rigau, por las querellas admitidas a trámite contra ellos por la celebración del proceso participativo del pasado 9 de noviembre.

La ANC, impulsora de las manifestaciones de la Diada y la Via Catalana, ha hecho un llamamiento a responder con las autoinculpaciones a lo que considera un ''ataque al proceso participativo''. Así lo ha definido, el coordinador de la comisión de Desobediencia, Andreu Porta.

El líder de ERC, Oriol Junqueras, y los dirigentes de CiU, Jordi Turull y Josep Rull, han sido algunas de las caras conocidas de la política catalana que se han añadido a las colas generadas alrededor del edificio de la Audiencia de Barcelona.

Por su parte, el portavoz del Govern, Francesc Homs, ha afirmado, tras la reunión semanal del gobierno catalán, que la comunidad internacional siente "estupefacción" porque se hayan admitido unas "querellas y demandas" contra un Govern elegido democráticamente porque el 9 de noviembre se celebró en Cataluña un proceso participativo. Según Homs, esto denota que en España tiene aún "una cultura democrática escasa".

Según Homs, la querella "no tiene ningún sentido" en un país democrático y, a su parecer, solo demuestra que el Gobierno español está actuando a la desesperada.

Tras la admisión a trámite de las querellas contra Mas, Ortega y Rigau, la Asamblea Nacional Catalana (ANC) ha comenzado una campaña de autoinculpación por el 9-N. La ANC pide a los ciudadanos que fueron a votar en el proceso participativo que rellenen un formulario de su web y lo presenten ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña o ante un juzgado de guardia. De esta forma, tal y como ha explicado Andreu Porta, coordinador de la comisión de Desobediencia, se quiere reivindicar que la jornada del 9-N fue pacífica, democrática, cívica y con el único objetivo de consultar la voluntad del pueblo catalán de cara a su "futuro colectivo".

Oriol Junqueras ha sido aclamado por muchas de las personas que hacían cola y que le pedían llegar a un acuerdo para llevar el proceso soberanista adelante. Junqueras no ha querido hacer declaraciones a los medios pero ha recordado que su acción es para dar apoyo al president Mas pero también a todas las personas que participaron en el 9-N y a la democracia.