El titular del juzgado de instrucción número 11 de Madrid, Juan Javier Pérez Pérez, ha mantenido la prisión provisional para el presunto pederasta de Ciudad Lineal, Antonio Ortiz, al considerar que el riesgo de fuga del recluso es muy elevado a la vista de la gravedad de los hechos.

Fuentes jurídicas han informado de que el juez ha tomado esta decisión después de que esta mañana Antonio Ortiz se negara a declarar ante el magistrado.

En el auto el juez ratifica la prisión provisional del supuesto pederasta al considerar que existe un "claro riesgo de fuga"  derivado no solo por las penas correspondientes a los delitos que se le imputan, sino también "al hecho constatado en la causa de que el imputado ya intentó eludir la acción policial y judicial", al abandonar su domicilio en Madrid e ir a Santander.

El magistrado añade también el riesgo de reiteración delictiva "dada la pluralidad de hechos análogos que le son imputados y teniendo en cuenta además el informe forense".

Al respecto, afirma el juez, "se considera que el imputado padece un trastorno de la personalidad con rasgos disociales y narcisistas, con bajo nivel de empatía y tendente a la manipulación con incapacidad de asumir culpa, aprender de la experiencia y dificultad para asumir responsabilidades".

En el auto, el juez expone los hechos respecto de los que existen indicios más fuertes para inferir en la autoría del imputado, que que son los cuatro casos consumados de agresión sexual a cuatro menores. Todas ellas le identificaron en las ruedas de reconocimiento, recuerda el magistrado.

"Todo ello conduce a ratificar la medida de prisión provisional del imputado", señala el juez, acordada antes por los juzgados de instrucción de números 10 y 2.

Ortiz apenas ha comparecido durante una veintena de minutos ante el instructor y se ha acogido a su derecho a no declarar ante el juez, que le había citado para resolver si le mantenía en prisión provisional.

Además, el juez ha rechazado la petición de la defensa que había reclamado la nulidad de las ruedas de reconocimiento y de los registros efectuados en el piso de la calle Santa Virgilia, donde se hallaron dos huellas palmares de una de las víctimas en la funda de plástico de un colchón.

Este magistrado aceptó hacerse cargo de la instrucción después de que el juez de instrucción número 2 de Madrid, Antonio Zamarriego, que investigaba la causa desde finales de noviembre, se inhibiera porque el Juzgado 11 conoció antes un caso cuyo presunto autor es Antonio Ortiz.

Previamente, la jueza de instrucción número 10 se había inhibido en Antonio Zamarriego por el mismo motivo.