Las seis personas detenidas este viernes durante un desahucio en el madrileño distrito de Usera han sido puestos este sábado el libertad con cargos por el titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Madrid, según fuentes judiciales. A los seis arrestados, con edades comprendidas entre los 20 y los 30 años, se les imputan los delitos de resistencia y desobediencia a la autoridad.

Los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana de este viernes en el número 51 de la calle Carabelos, cuando varias decenas de personas que permanecían congregadas desde la noche del jueves dentro y fuera del piso que iba a ser desalojado, en el vive una pareja con tres hijos, intentaron paralizar el desahucio y se enfrentaron a la Policía.

Durante su declaración ante el magistrado han sostenido que "no hicieron nada" de lo que les acusa la Policía y que se limitaron a participar de forma pacífica en una acción de protesta contra el desahucio de una familia, ha dicho en declaraciones uno de sus abogados, Manuel San Pastor.

El letrado ha subrayado que es "incierto" que uno de los detenidos hubiera intentado arrebatar la pistola a uno de los agentes y ha asegurado que en el atestado policial no consta ninguna acción de este tipo.

Más de medio centenar de personas, convocadas por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y el Grupo de Vivienda de Usera, se concentraron a las puertas de los Juzgados de Plaza de Castilla, donde corearon consignas por el derecho a la vivienda y la libertad de los detenidos. Los participantes en la concentración dieron la bienvenida a los arrestados cuando quedaron en libertad.

En el interior de la vivienda desahuciada había varias personas encadenadas, entre ellas la mujer y la hija del expolítico Jorge Verstrynge, que han sido identificadas, pero no detenidas.

La familia desahuciada este viernes no sabe dónde vivirá con sus tres hijos —de 9 y 4 años y de 20 días—, y está a la espera de cobrar la Renta Mínima de Inserción para poder pagar un alojamiento, han explicado Jorge Manuel y su pareja Yolanda.

Jorge ha dicho que una administradora de Kutxabank le engañó, porque les prometió un alquiler social durante al menos cuatro meses desde que naciese su hijo, pero este viernes les desalojaron.