El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha asegurado este viernes que los homenajes a etarras excarcelados en el País Vasco no se hubieran producido si la Policía Nacional o la Guardia Civil hubieran estado allí.

Fernández Díaz ha respondido así en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros sobre los actos de recibimiento que han recibido algunos etarras tras su salida de prisión por la derogación de retroactividad de la doctrina Parot.

Preguntado sobre si la Ertzaintza está actuando adecuadamente en estos casos, el titular de Interior ha recordado que es la Policía autonómica quien tiene la responsabilidad en Euskadi y ha sentenciado: "Les aseguro que si fuera la Guardia Civil o la Policía eso no se hubiera producido. Y lo dejo ahí".

Ante la insistencia de los periodistas, Fernández Díaz ha extendido más su respuesta y ha dicho que si los terroristas excarcelados hubieran ido a Navarra o a otras comunidades donde la competencia en materia de seguridad ciudadana la tienen la Policía y la Guardia Civil "esto no hubiera ocurrido".

"Lo reitero y es lo que digo", ha subrayado el ministro antes de aseverar que la quema de contenedores o el presunto enaltecimiento del terrorismo y humillación de las víctimas, que supuestamente se ha producido, no hubiera tenido lugar, porque él mismo hubiera dado "las órdenes oportunas".

Tras asegurar que la profesionalidad de las fuerzas de seguridad del Estado está plenamente acreditada, el ministro ha señalado que el Gobierno lamenta lo sucedido, pero "ha hecho todo lo que se podía hacer".

Desde el máximo respeto a la distribución competencial, Fernández Díaz ha indicado que su departamento ha puesto en conocimiento de la Fiscalía esos actos por si fueran constitutivos de un delito de enaltecimiento del terrorismo.

Como ya hiciera este jueves, el titular de Interior ha recordado que cada vez que el Gobierno es informado de la excarcelación de un etarra o de un peligroso delincuente en virtud de la derogación de la retroactividad de la doctrina Parot, lo pone en conocimiento de la Guardia Civil y la Policía, y de las delegaciones del Gobierno.

Ha recordado que la cárcel facilita al ya exrecluso los recursos económicos para trasladarse al lugar que previamente ha comunicado como residencia y, por tanto, las delegaciones del Gobierno y las fuerzas de seguridad deben saberlo.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado este viernes que la liberación de delincuentes a consecuencia de la anulación de la doctrina Parot "repugna a todos", incluidos los jueces que las deciden y que ha recordado que son los que les enviaron a prisión.

Rajoy ha sido preguntado en la conferencia de prensa que ha ofrecido en Vilna si le preocupaba más que la anulación de esa doctrina esté suponiendo la liberación de violadores y asesinos, que la puesta en libertad de terroristas.

El jefe del Ejecutivo ha señalado que él ya ha dicho que no le gusta nada la decisión del Tribunal de Estrasburgo como tampoco le gusta a la gran mayoría de españoles.

Y ha puntualizado que no le gusta lo que ha supuesto tanto por la liberación de terroristas de ETA como de "gentes" citadas en la pregunta que le habían realizado los periodistas.

"Nos repugna a todos, pero de la misma forma que digo eso, tengo que decir que los jueces que ahora están tomando estas decisiones, estoy absolutamente convencido de que también las toman sin que les guste tomarlas", ha señalado.

En este contexto, ha destacado que los jueces que están decidiendo las liberaciones son los que en su día persiguieron a estos delincuentes y los metieron en la cárcel.

"Es muy triste, es muy duro y es muy desagradable, pero lo es para todos. Primero para las víctimas, desde luego, pero también para los propios jueces y para el conjunto de la sociedad española", ha añadido Rajoy.