El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha considerado este viernes que es "fantástico" para su partido que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, tenga cada vez más poder y más fuerza, y ha valorado el ejercicio de "inteligencia, de suma y de unidad" que está haciendo para la nueva Ejecutiva del PSOE-A.

En una entrevista en la Cadena Ser, Rubalcaba ha insistido en no desvelar si va a presentarse a las primarias abiertas de su partido para elegir al futuro candidato a la Moncloa y tampoco se ha pronunciado sobre la fecha en la que se celebrarán.

Convencido de que el PSOE va a ganar las próximas elecciones europeas, Rubalcaba ha admitido que tiene un problema de liderazgo, tal y como dijo hace unas semanas el ex presidente Felipe González.

"No sólo yo", ha precisado, para agregar a renglón seguido: "Eso no lo hace mejor, porque mal de muchos es una epidemia, no es un consuelo".

Sobre Susana Díaz, que este fin de semana será elegida secretaria general del PSOE-A, Rubalcaba ha señalado que la federación andaluza es "clave" para el conjunto del partido y, por eso, es "fantástico" el hecho de que haya un relevo y que se haga bien y de que haya una líder que cada vez tiene más poder y más fuerza.

En esa misma entrevista, Rubalcaba han lanzado un mensaje al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy. Le ha dicho que no hace falta que pida informes sobre la concertina de la valla fronteriza de Melilla porque España ya vivió esa experiencia. "Efectivamente, Mariano, las cuchillas cortan, quítalas esta tarde".

El líder socialista ha recordado que él, como ministro del Interior, retiró las cuchillas de la valla de Melilla en el año 2007 porque son un sistema de protección "inhumano", que no sólo cortan sino que incluso alguien puede morir si queda enganchado.

"Que no busque informes, que ya los hay, pero se lo digo yo, que es más fácil (...) que me llame por teléfono y se lo digo: las cuchillas cortan", ha subrayado.

Rubalcaba también se ha referido al proyecto de ley de seguridad ciudadana, ha apuntado que en realidad es "una ley de orden público, tremenda", que si se aprueba en los términos que se van conociendo va a retrotraer al país a "tiempos preconstitucionales".

En este contexto, ha considerado que la primera parte de la legislatura de Rajoy ha consistido en "recortar" derechos sociales y laborales y ha pronosticado que ahora les toca "a los otros derechos", como el de huelga, manifestación, expresión o aborto.