Los dos detenidos por el atraco a la oficina de Correos del Sardinero, E.F.A.E., de 54 años, y a J.I.B.D., de 50 años, han ingresado a prisión.

Estos individuos, que portaban armas de fuego en el momento del atraco, pasaron el lunes a disposición del Juzgado de Instrucción, en funciones de guardia, que decretó su entrada en prisión, según ha informado en un comunicado la Policía Nacional.

Se les imputa como autores de presuntos delitos de robo con violencia e intimidación (atraco) en grado de tentativa; detención ilegal, tenencia ilícita de armas, y atentado a los agentes de la Autoridad.

Según la Policía, ambos cuentan con "numerosos" antecedentes policiales por "hechos similares y otros delitos contra el patrimonio".

El atraco

Los hechos ocurrieron sobre las 20.00 horas del pasado viernes, cuando un ciudadano vio al pasar por la oficina de Correos, ubicada en la calle Las Cruces, que se encontraba cerrada en horario de atención al público.

Según el relato policial, este ciudadano percibió que en el interior de la misma están ocurriendo "cosas raras" y llamó al 091 para dar el aviso.

Entonces dos dotaciones policiales se trasladaron al lugar y sorprendieron a los dos individuos iniciando la huida desde la Oficina de Correos hacia la Avenida de Los Castros cubriéndose la cabeza con gorra y capucha y el rostro con pañuelos embozados.

Éstos fueron perseguidos haciendo caso omiso a los gritos de "alto Policía", lo que llevó a los agentes a disparar dos tiros "intimidatorios al aire", según explica la Policía.

Al cabo de una treintena de metros uno de ellos, que llevaba el arma en la mano, tropezó y cayó al suelo, momento que aprovecharon los agentes para detenerle.

El otro individuo siguió corriendo por la calle Palencia, haciendo "caso omiso", según la Policía, a las indicaciones y advertencias de los dos agentes que le perseguían para que se arrojara al suelo. De nuevo los policías efectuaron otros dos tiros al aire.

Momentos después, el atracador detuvo su marcha y se "abalanzó" contra uno de los agentes "con la intención de quitarle su arma reglamentaria".

El agente cayó al suelo y, en ese instante, el hombre se echó la mano a la cintura y extrajo un arma de fuego "haciendo ademán de encañonar al agente".

Otro policía que vio la escena efectuó un disparo "a partes no letales", que le impactó al hombre en la parte inferior de la rodilla izquierda del delincuente, procediendo a su detención. Fue llevado a Valdecilla en donde fue dado de alta horas más tarde.

Igualmente, necesitaron asistencia facultativa uno de los agentes actuantes y una de las empleadas de la oficina de Correos por el estado de nervios sufrido durante la comisión del hecho delictivo.

En el momento de la detención se les intervino dos pistolas, el botín del atraco —1.775 euros en metálico—, una navaja y un teléfono móvil.