"Estacionar, sin el distintivo que lo autoriza, en lugar habilitado para el estacionamiento con limitación horaria". La frase se repite una y otra vez, en una cascada de multas de tráfico que no paran de llegar, y que oscilan entre 63 y 90 euros. La conductora, la infractora, es Carmen Rodríguez Quijano, esposa de Francisco Correa, también imputada en la trama Gürtel. El que recibe las sanciones es José Luis Peñas, exconcejal de Majadahonda. Fue él quien denunció el caso en 2007 a la Policía, tras pasar dos años grabando a Correa y recogiendo pruebas de sus oscuros negocios.

Una conduce, el otro paga. Así se puede resumir esta historia. Peñas ha recibido desde finales de 2009 cerca de 110 multas de tráfico debido a las negligentes maneras al volante de Carmen Rodríguez. Peñas ha pedido en reiteradas ocasiones al juzgado que dicte oficios a la DGT y al Ayuntamiento de Madrid para que estos dos organismos tengan claro que la "poseedora, tenedora y usuaria" del Mini Cooper de color negro matrícula 4978-CBW no es él, sino ella.

El problema es que el coche está a su nombre. El vehículo fue comprado en noviembre de 2002 en Ponferrada (León) por Guillermo Ortega, exalcalde de Majadahonda (Carmen Rodríguez trabajaba para él) e imputado también en la trama. En abril de 2007, el exregidor le regaló el coche a Correa "como contraprestación a una deuda contraída por el Consistorio de Majadahonda", según la documentación judicial a la que ha tenido acceso 20minutos.

Pero Correa nunca ponía sus bienes a su nombre, por lo que pidió a Peñas que fuera él el titular del vehículo. Este lo hizo el 3 de abril de 2007. Entonces ya estaba grabando a Correa y recopilando pruebas contra él, y le pareció una buena manera de "acreditar" ante la Justicia el "modus operandi de Correa". Peñas nunca utilizó el coche, que pasó directamente a Carmen.

Las multas empezaron a llegar a finales de 2009, cuando la trama ya se había destapado, y con ellas la pesadilla judicial para Peñas. En febrero de 2010 elevó el primer escrito al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), el juzgado que entonces llevaba el caso antes de pasar a la Audiencia. En ese escrito, los abogados de Peñas pedían que el TSJ de Madrid que comunicara a la DGT y al Ayuntamiento de Madrid que él nunca fue el dueño del coche y que él nunca lo ha conducido.

Para ello, aportaba las multas en las que claramente se identificaba como conductor a Carmen Rodríguez, la comparecencia de Peñas en noviembre de 2007 ante la Policía en la que informaba de la operación de ocultación del titular del Mini por parte de Correa, el informe de la Policía que aseveraba que el coche pertenecía realmente a Correa, y la declaración policial de Carmen Rodríguez, en la que reconocía que ella era quien usaba el coche y "lo tenía en Pozuelo". Todos estos documentos obran en poder de este diario.

No ha servido de nada. Peñas también ha elevado escritos a la DGT y al Ayuntamiento, y no duda en recurrir todas las multas que puede, aunque ya ha tenido que pagar algunas para que no le embarguen sus cuentas. La cascada de sanciones no cesa. De hecho, esta misma semana ha recibido otras tres. La gran mayoría son del Consistorio de Madrid por aparcar mal, aunque hay alguna por exceso de velocidad y maniobras prohibidas. El coche, aunque está embargado por la Audiencia Nacional, no está intervenido, por lo que la esposa de Correa sigue disfrutando de él. Ahora, la defensa de Peñas va a enviar un escrito al juzgado número 5 de la Audiencia Nacional para que haga efectivo de una vez el embargo del Mini Cooper.