La voluntad del soldado israelí Kevin Cohen se cumplirá cuatro años después de haber muerto en Gaza.
Un tribunal israelí permitirá a sus padres que utilicen el semen de su hijo, muerto en 2002, para fecundar a una joven a la que Cohen no conocía.
Según sus padres, el soldado siempre había manifestado su voluntad de tener hijos, pero no pudo cumplir su sueño cuando murió, con 20 años.
Los padres ven cumplido su deseo tras cuatro años de lucha legal, pese a las reticencias de la Justicia israelí por no haber un documento escrito que avalase la voluntad de Cohen.
Su abogado, Irit Rosenblum, destacó en declaraciones a la BBC que el fallo sienta jurisprudencia para procrear y dar lugar a descendencia por inseminación artificial y sin que exista un consentimiento por escrito del fallecido.
200 voluntarias
Más de 200 voluntarias quisieron cumplir el sueño de Cohen, prestándose para ser inseminada con el semen que atesoraba un banco privado israelí.
En un primer momento, los médicos se negaron a proceder a la inseminación argumentando que sólo la esposa del muerto tenía derecho a reclamarlo. Pero Kevin no estaba casado.
A partir de entonces, los padres del joven iniciaron la batalla legal para demostrar que su hijo quería tener hijos, aportando su propia convicción y a sus amigos y familiares como testigos.
Ahora que lo han conseguido, el abogado de la familia afirma que también para ellos "es un sueño hecho realidad, porque perdieron un hijo pero han ganado algo de esperanza".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios