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Agresiones: En primaria, los autores suelen ser, mayoritariamente, los padres de alumnos. En cambio, en los cursos de secundaria, los estudiantes ocupan el puesto de sus tutores.

Cultura: Aunque Barri explica que «hay padres agresivos» en todos los estratos, apunta que aquellos con más recursos intelectuales y económicos arreglan los «conflictos» con los profesores de sus hijos «con amenazas y denuncias, infundadas en su mayor parte». En cambio, los de recursos limitados suelen «usar la fuerza».

Alumnos: Los agresores «pasan primero por fases como perder el respeto a su profesor» y son «chulescos».

Profesores: Acuden más al teléfono de SOS Bullying porque, según Barri, «no ven que haya soluciones», «han perdido el miedo a denunciar» y «se sienten incomprendidos por la Administración». Las agresiones a este colectivo «no son tan poco habituales», sentencia.

Más datos sobre violencia escolar

Llamadas: Más de la mitad de las que recibe SOS Bullying son de padres que denuncian problemas de sus hijos. Sólo un 8% son de alumnos. Cuando llaman es porque «están en una situación crítica», dice Barri.

Asesoramiento: Los técnicos que atienden a los afectados por la violencia escolar en el servicio telefónico de ANPE intentan ayudarlos desde el plano psicológico, psicopedagógico y jurídico.

Picos: Se reciben más llamadas (ya sean de profesores, padres o alumnos) a finales del primer trimestre del curso (entre finales de noviembre y principios de diciembre) y a mediados del segundo (hacia el mes de febrero).

Secundaria: La mayoría de las agresiones y casos de amenazas que se han detectado se producen entre el segundo y tercer curso de este nivel educativo.