La Iglesia tiene nuevo papa: el argentino Jorge Mario Bergoglio, conocido como Francisco I

Fumata blanca
Fumata blanca
Fumata blanca

Poco después de las siete de la tarde de este miércoles 13 de marzo llegó la fumata blanca en el Vaticano que anunciaba el nombramiento de un nuevo papa, en sustitución del retirado Benedicto XVI. La plaza de San Pedro del Vaticano se llenó de júbilo y alegría a la espera de conocer el 266 sucesor del apóstol Pedro, que finalmente es el argentino Jorge Mario Bergoglio, que pasa a ser conocido como Francisco I. Así vivimos un acontecimiento histórico.

Minuto a minuto

Cerramos a esta hora este minuto a minuto tras la elección de Jorge Mario Bergoglio como nuevo papa. Un día histórico para la Iglesia católica, que seguirá siendo foco de atención en los próximos días. Saludos.
La Compañía de Jesús en España ha asegurado que el nuevo papa Francisco I siempre se ha mantenido "en libertad con respecto a las autoridades" y ha llevado un estilo de vida "sencillo" y con "gran preocupación social".
La canciller alemana, Angela Merkel, felicitó "a todos los cristianos de América Latina".
El presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó que el fallecido Hugo Chávez se encuentra ahora frente a Cristo y "alguna cosa influyó para que se convoque a un papa suramericano".
El primer ministro italiano en funciones, Mario Monti, transmitió "el afecto y la felicidad" que sus compatriotas sienten por la elección del cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio como papa, para lo que ha elegido el nombre del patrón de Italia, san Francisco de Asís.
El prelado del Opus Dei Javier Echevarría, ha manifestado su "incondicional reverencia y obediencia" al nuevo papa Francisco I, y ha expresado su "completa adhesión" al Sumo Pontífice.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, felicitó al nuevo papa Francisco I y al pueblo argentino y dijo que los fieles del país lo esperan en Río de Janeiro en julio próximo para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). "En nombre del pueblo brasileño, congratulo al nuevo papa Francisco I y felicito a la Iglesia católica y al pueblo argentino", manifestó Rousseff en un comunicado divulgado por el Palacio de Planalto, sede del Ejecutivo.
El presidente de EE UU, Barack Obama, felicita al nuevo papa Francisco I, a quien describe como un "paladín de los pobres y de los más vulnerables".
El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan Antonio Martínez Camino, ha expresado su "inmensa alegría" por el nombramiento de Jorge Mario Bergoglio como papa y ha dicho que tiene "el perfil de un santo".
La presidenta argentina, Cristina Fernández, ha felicitado a Jorge Mario Bergoglio, el nuevo papa Francisco I, y le desea una "fructífera tarea pastoral".
La misa de inicio de pontificado del papa Francisco será el 19 de marzo, festividad de san José, patrón de la Iglesia, informó el portavoz vaticano, Federico Lombardi.
El nuevo papa Francisco I siempre ha sido un hombre "muy sencillo y muy humilde", además de buen estudiante, "como todos los jesuitas", según ha asegurado el vicario general de la Diócesis de Alcalá de Henares (Madrid), Florentino Rueda, ciudad en la que hizo parte de su preparación como sacerdote.
Como curiosidad, el nuevo papa, originario de un país que vive el fútbol casi como una segunda religión, es seguidor del San Lorenzo de Almagro.
La catedral de Buenos Aires se llenó rápidamente de feligreses, que después de unos minutos de silencio para digerir la noticia, irrumpieron en aplausos con gritos de "¡¡Viva el Papa!! y ¡¡Francisco, Francisco!!".
El nuevo papa afronta una agenda marcada por el Año de la Fe y la Jornada Mundial de la Juventud de Río. Esas serán sus principales citas pastorales, pero habrá más eventos en su calendario. Aquí, algunas de ellas.
Margallo, ministro de Exteriores español, elogia al papa por hablar español, ser jesuita y "gente de fiar".
La cuenta oficial de Twitter, @Pontifex, vacía desde la renuncia de Benedicto XVI, vuelve a estar activa y publica su primer tuit, escrito en latín: "HABEMUS PAPAM FRANCISCUM".
Líderes latinoamericanos, como Peña nieto, en México, o Correa, en Ecuador, ya han felicitado al nuevo papa. En un mensaje enviado a través de la red social Twitter, el mandatario mexicano saludó "con respeto y afecto al papa Francisco I, jefe del Estado Vaticano".
Francisco I, como latinoamericano, tendrá que hacer frente a uno de los retos que la Iglesia católica tiene por delante, precisamente en dicho continente: el neutralizar la influencia de otros credos, tanto dentro del cristianismo, como fuera.
El catolicismo, que 'habla' español desde hace años (la mayoría de los fieles de esta religión hablan esta lengua), nombra como sucesor del papa alemán a uno argentino.
Las campanas de la catedral de Buenos Aires repican tras conocerse la elección de Francisco I.
"¿Quo nomine vis vocari?" ("¿Con qué nombre quieres ser llamado?"). El nuevo pontífice respondió "vocabor Franciscus" (Me llamaré Francisco). Es la pregunta que le hizo el cardenal Giovanni Battista al nuevo papa. Los nombres que eligen los cardenales siempre son significativos de las líneas maestras que quieren dar a su pontificado.
Mariano Rajoy y los reyes se han apresurado a enviar sendos telegramas de felicitación al nuevo papa. El jefe del Ejecutivo le pide que acepte su "más calurosa y respetuosa felicitación".
Como curiosidad, el nuevo papa, Francisco I, y su antecesor, Benedicto XVI, estarán ahora separados solo por la treintena de kilómetros de distancia que hay entre el Vaticano y Castel Gandolfo.
Los católicos argentinos recibieron con sorpresa y emoción el anuncio de la elección de Jorge Bergoglio como nuevo Papa. Silbidos y algunos bocinazos en las calles del centro de la capital argentina celebraron el nombramiento de Francisco I.
Finalmente, ninguno de los principales candidatos, presentes en las quinielas de papables, ha salido elegido papa. Cierta sorpresa en San Pedro y entre los vaticanistas del mundo.
El papa Francisco I ha dicho en sus primeras palabras a los fieles que "parece que los cardenales han ido a buscar al nuevo pontífice al fin del mundo", en referencia a su país, Argentina.
Así es Francisco I, en breves pinceladas: argentino e hijo de italianos, de profesión químico antes que sacerdote y nombrado cardenal por Juan Pablo II. Se ha mostrado firme contra el matrimonio homosexual.
Las primeras palabras de Francisco I han sido para el papa emérito, Benedicto XVI, para quien ha pedido una oración (recitada en latín).
Francisco I se acerca al balcón de la plaza de San Pedro. La multitud ruge. Serán sus primeras palabras como sumo pontífice del catolicismo.
Francisco I es jesuita, tiene 75 años, y fue el segundo en el cónclave que eligió a Benedicto XVI.
Jorge Mario Bergoglio, nacido en 1936, será papa con el nombre de Francisco I. Se trata del primer papa latinoamericano de la historia de la Iglesia católica.
Ya se conoce el nombre del nuevo papa: será el cardenal Jorge Mario Bergoglio, argentino.
La Santa Sede informó al mundo de que ya tenía un nuevo papa no solo a través de la fumata blanca que salió de la chimenea de la Capilla Sixtina del Vaticano, sino que también anunció la noticia a través de Twitter.
Se acerca el momento, tras las cortinas se ven sombras. Pronto se abrirá el balcón del Vaticano y se anunciará al mundo católico el nuevo papa.
Cuando se vio la fumata blanca, muchos de los presentes en la plaza se abrazaron, algunos con lágrimas y muchos hicieron ondear las banderas de sus países y del Vaticano que portaban a la espera de ver salir al balcón principal engalanado con terciopelo granate al nuevo pontífice.
Algunos de los cardenales con más posibilidades de ser papa, según los vaticanistas, tenían una cuenta en Twitter. Entre ellos, el cardenal Angelo Scola, uno de los favoritos, cuya cuenta en dicha red social -@angeloscola- ha sido eliminada.
Las campanas de varias catedrales y numerosas iglesias españolas han comenzado a repicar esta tarde tras el anuncio de la elección del sucesor de Benedicto XVI. Es el caso de la catedral de la Almudena, cuyas campanas han comenzado a tocar nada más observarse la fumata blanca y seguirán haciéndolo hasta que se anuncie el nombre del nuevo papa.
La rapidez en la elección mantiene la tónica de los últimos decenios, en los que no se han superado las once votaciones.

Pío XII fue elegido con tres votaciones y en apenas 24 horas; Juan Pablo I, con cuatro; Benedicto XVI con cuatro, Pablo VI, con cinco; Juan Pablo II, con ocho, y Juan XXIII, con once.
Banderas, paraguas... las personas que se agolpan en la plaza de San Pedro esperan con emoción que se abra el balcón del Vaticano. Será el protodiácono, el francés Jean-Louis Tauran, de 67 años, quien saldrá a anunciar el nombre del nuevo pontífice.
Música y cánticos en la plaza de San Pedro del Vaticano a la espera de conocer quién es el nuevo papa.
El cónclave para elegir al sucesor de Benedicto XVI ha durado más que el anterior en el que fue elegido el cardenal Joseph Ratzinger, en la cuarta votación, el 19 de abril de 2005. La fumata blanca que anunció al mundo que el cardenal alemán era el nuevo papa se produjo a las 17.50 horas local del 18 de abril de ese año. El cónclave había comenzado un día antes.
La guardia suiza aparece en la plaza de San Pedro, donde se oyen gritos de júbilo y alegría. Momento inolvidable para los presentes en el Vaticano.
Recordemos que se trata del 266 sucesor del apóstol Pedro.
Luego llega la hora de rezar el 'Te Deum', un himno tradicional cristiano que suele ser habitual en momentos de celebración. Posteriormente aparece la novedad de esta elección. El nuevo papa, en vez de salir al balcón, irá a rezar a la Capilla Paulina ante el Santísimo Sacramento.
Después de pasar por el 'cuarto de las lágrimas', el ritual continúa en el trono de la Capilla Sixtina, donde los cardenales electores se van acercando por orden para expresar su respeto y obediencia al recién elegido papa.
Posteriormente, el maestro de ceremonias litúrgicas levanta acta de lo sucedido y de la aceptación del elegido de su nueva labor como pastor de la iglesia.
Al nuevo papa se le ha preguntado si acepta ("¿Acepta su elección canónica como Soberano Pontífice?") y qué nombre desea tomar ("¿Con qué nombre quiere ser llamado?"). Este momento pone punto final al cónclave.
La gente se abraza, llora, y saluda hacia la Basílica donde está el balcón principal engalanado con terciopelo granate y desde el que el nuevo papa se asomará para pronunciar sus primeras palabras como pontífice al mundo.
Júbilo en la plaza de San Pedro del Vaticano. Las cámpanas repican sin cesar. El humo blanco sigue saliendo de la chimenea.
¡Hay fumata blanca en el Vaticano! Los cardenales han elegido al nuevo papa.
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