Gerardo Díaz Santamaría, hijo del expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, que se encuentra en prisión desde diciembre, ha sido citado a declarar, en calidad de imputado, en la causa por el vaciamiento patrimonial del grupo turístico Marsans, según han informado fuentes jurídicas.

Así, Díaz Santamaría, a quien se atribuye indiciariamente un delito de alzamiento de bienes dirigido a burlar a los acreedores de una de las sociedades del grupo de su padre, deberá comparecer frente al juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, el próximo 12 de marzo, a las 10 de la mañana, dentro del marco de la conocida como Operación Crucero.

Este caso investiga la estrategia diseñada por el expresidente de la patronal para crear una "aparente insolvencia" y evitar, de esta manera, pagar a los acreedores del grupo Marsans.

Díaz Ferrán y su socio, el fallecido Gonzalo Pascual, habrían diseñado, según un auto de la sección segunda de la sala de lo penal del tribunal de la Audiencia Nacional, una estrategia para trasladar su patrimonio personal y empresarial a Angel de Cabo, a través de testaferros y complejas estructuras societarias, algunas en paraísos fiscales.