Rajoy se estrena con un desfile del 12-O austero y sin abucheos

  • El presidente de la Generalitat, Artur Mas, no ha acudido a Madrid.
  • En Barcelona hay una concentración en favor de la unidad de España.
  • El desfile militar ha sido más reducido debido a la crisis económica.
  • La infanta Elena no siguió el desfile en la tribuna de autoridades.
Rajoy y Rubalcaba, en el Día de la Hispanidad de 2011.
Rajoy y Rubalcaba, en el Día de la Hispanidad de 2011.
GTRES
Rajoy y Rubalcaba, en el Día de la Hispanidad de 2011.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha estrenado como jefe del Ejecutivo en los actos con motivo de la Fiesta Nacional, que ha contado con el desfile militar más austero debido a la crisis económica y que se ha celebrado "sin abucheos" y en medio del debate sobre las aspiraciones soberanistas en Cataluña.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, no ha acudido ni al desfile ni a la posterior recepción que ofrecen los reyes en el Palacio Real y tampoco ha enviado a un representante porque su Gobierno subraya que su fiesta nacional es la Diada del 11 de septiembre. Pero a esos actos tampoco asisten, por diversas razones, los presidentes de Andalucía, Comunidad Valenciana, Galicia, País Vasco, Baleares, La Rioja, Cantabria y Melilla.

La madrileña plaza de Neptuno ha acogido la tribuna de autoridades para el desfile militar, en la que, a diferencia del año pasado, no están los duques de Palma. Don Juan Carlos, doña Sofía y los Príncipes de Asturias son los miembros de la Familia Real que lo presiden  acompañados de las máximas autoridades del Estado, entre ellas, Rajoy, sus ministros, los presidentes del Congreso y del Senado, y los máximos responsables del Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo.

En los últimos años se habían convertido en habituales los silbidos y abucheos con los que era recibido el anterior jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a su llegada a la zona de autoridades y en otros momentos del desfile. Eso motivó que se decidiera una disposición distinta de las tribunas de público, alejándolas de donde se ubicaban los miembros de la Familia Real y del Gobierno. Sin embargo, este año no ha habido recriminaciones a la tribuna.

Sin la Infanta Elena en la presidencia

La Infanta Elena no acompaña este año a los Reyes y los Príncipes en la tribuna en la que presiden el desfile  como sí hizo el año pasado. La Infanta Elena siguió la parada militar en una tribuna situada a la derecha de la presidencial, en la que se encuentran autoridades del Estado. La hija mayor de los Reyes se sentó junto al líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba y al portavoz parlamentario del PP en el Congreso, Alfonso Alonso.

Fuentes de la Casa del Rey han informado de que la infanta Elena tampoco estuvo en la línea de saludo para recibir a los invitados en la recepción ofrecida por don Juan Carlos. Las fuentes citadas han señalado que doña Elena no tiene por qué participar necesariamente en los actos oficiales en los que la representación de la Familia Real corresponde a la jefatura del Estado. Esta decisión no cuestiona en ningún momento la pertenencia a la Familia Real de la infanta Elena, que seguirá teniendo su agenda de actividades oficiales.

'Nuestra fuerza somos todos'

Unos 2.600 militares participaron en el desfile, que este año, con el lema 'Nuestra fuerza somos todos', fue 150 metros más corto y no contó con exhibición aérea ni con la presencia de acorazados, carros de combate y blindados. Esa ausencia se debe al drástico recorte del presupuesto para el mismo, ya que este año es de 900.000 euros frente a los cerca de 2,8 millones del año pasado. Solo se mantuvo el vuelo de la patrulla acrobática Águila, que dejará sobre los cielos de Madrid la estela con los colores de la enseña nacional. En el desfile participan unidades de los tres Ejércitos y de la Guardia Civil.

Los reyes ofrecen en el Palacio Real una recepción a las autoridades del Estado y a los representantes de los partidos políticos, entre ellos el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba. En esa recepción tampoco estarán la infanta Cristina y su esposo, Iñaki Urdangarin, apartado de las actividades oficiales de la Familia Real desde diciembre pasado, unos días antes de que el juez Castro le citara como imputado en el caso Nóos.

El debate sobre las aspiraciones soberanistas catalanas han motivado que, coincidiendo con la celebración de la Fiesta Nacional, varios colectivos hayan convocado en Barcelona una concentración en favor de la unidad de España y contra la secesión de Cataluña. Una concentración que se ha desarrollado con el lema 'Cataluña somos todos' y que tiene el apoyo del PP catalán, UPyD y Ciutadans.

La jornada de este viernes ha contado con una videoconferencia del ministro de Defensa, Pedro Morenés, con los mandos de las misiones españolas en el exterior y que también se ha convertido ya en una tradición con motivo de la Fiesta Nacional.

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