El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha dicho este lunes que no habrá "ningún tipo de satisfacción intermedia" por nada que no suponga la desaparición de la banda terrorista ETA.

Así lo ha expresado a los medios de comunicación al ser preguntado por la declaración de la izquierda abertzale hecha pública este domingo en San Sebastián en la que lamenta que su "posición política" ante las "consecuencias derivadas de la acción armada de ETA" haya podido suponer "un sentimiento de humillación hacia las víctimas".

Gallardón ha señalado que cuando existe una situación de profunda agresión al sistema democrático como es la existencia de una banda terrorista ETA no se puede pretender "ningún tipo de satisfacción intermedia" por nada que no suponga la desaparición de la propia banda terrorista. "ETA tiene que disolverse y desaparecer como amenaza potencial de futuro y como una realidad incompatible con un sistema de libertades y democrático", ha resaltado el titular de Justicia.

El Gobierno no hará otra declaración que no sea la exigencia de disolución de la banda terrorista ETA, ha dicho Gallardón, quien ha indicado que no va a haber perversión del lenguaje, se utilice por quien se utilice, que lleve a un encuentro con los demócratas en "puntos intermedios" porque "el único punto" y "destino final" es la disolución de la banda terrorista ETA.

El ministro de Justicia también se ha referido a la declaración de Iñaki Urdangarin este fin de semana ante el juez José Castro, instructor del caso Palma Arena. Gallardón ha mostrado el respeto absoluto del poder ejecutivo por los distintos procedimientos para no interferir en ellos haciendo valoraciones de carácter político.

Ha pedido respeto a la independencia del poder judicial ante un procedimiento que tiene sus distintas fases en las cuales los organismos jurisdiccionales y todas las instituciones que colaboran con la administración de justicia son los que deben tener el protagonismo.