Se duplican en seis años los casos de sífilis detectados en la Comunidad de Madrid

  • En 2011, los médicos registraron 538 casos de la enfermedad, casi el doble que en 2005.
  • Los especialistas lo achacan a una relajación en la prevención.
  • Pese a ello, las autoridades aseguran que no hay motivo para la alarma.
Una mujer alcanza a un hombre un preservativo.
Una mujer alcanza a un hombre un preservativo.
: Patrick Sheàndell O' Carroll / GTRES
Una mujer alcanza a un hombre un preservativo.

Los madrileños parece que se han olvidado de la prevención en materia sexual. Al menos eso se desprende de los últimos datos proporcionados por el centro sanitario Sandoval, dependiente de la Comunidad y lugar de referencia para las enfermedades de transmisión sexual en la región. En 2011 los médicos especialistas de este centro detectaron 538 casos de sífilis, casi el doble que seis años atrás (en 2005), cuando diagnosticaron 226 casos.

"Esto se debe a una relajación en las labores de la prevención, tanto por parte de la Administración como de la ciudadanía en general. Se perciben como enfermedades menos graves y que se pueden tratar, incluso el VIH. Y eso es un error", explica Jorge Gutiérrez, médico de la asociación Madrid Positivo.

Y es que no solo han aumentado los casos de sífilis. Los especialistas también han detectado un incremento de otras enfermedades estos últimos seis años, como el VIH (de 186 en 2005 a 301 en 2011). Destaca especialmente la reaparición del linfogranuloma venéreo (LGV), una enfermedad parecida a la clamidia pero más agresiva y de la que no se conocían casos desde hace años, aunque en 2011 se descubrieron 94 infecciones.

El brote proviene probablemente de Ámsterdam, ya que la misma cepa fue identificada en 2003 en esta ciudad, y se ha extendido por toda Europa, incluidas otras urbes españolas como Barcelona. "La infección afecta más al colectivo homosexual, aunque también se han detectado casos entre heterosexuales", explican fuentes del centro Sandoval.

Contagio por sexo oral

La sífilis se contagia principalmente por contacto sexual, incluido el sexo oral. La enfermedad puede sobrevivir en el cuerpo durante años. Sus síntomas son difíciles de detectar, ya que se manifiestan en forma de pequeñas úlceras en la zona infectada (boca, genitales...) y manchas rosas en el cuerpo. Después suele provocar cuadros como fiebre, dolores de cabeza, lesiones cerebrales... e incluso la muerte si no se trata a tiempo.

Pese al aumento de casos, Jorge del Romero, director del centro Sandoval, asegura que no hay motivo para la alarma. "Estos datos solo confirman una leve tendencia al alza que se empezó a registrar a finales de los años noventa. No es que este año haya habido una incidencia especial de estas enfermedades", explica. "En el centro recibimos unas 30.000 consultas al año, entre las cuales ha sobresalido la sífilis, con 538", apostilla.

Además, entre las cifras del centro Sandoval destaca también el incremento de los diagnósticos de gonorrea en los últimos seis años (de 131 a 336) y los infectados por clamidia (de 205 a 546).

Más vulnerables

Según los médicos especialistas, los jóvenes son un grupo muy vulnerable para las infecciones de transmisión sexual debido a su escasa noción del riesgo, sobre todo la franja entre 25 y 29 años.

"Creen que una infección es cuestión de azar o suerte", explica un médico de Promoción de la Salud de la Consejería de Sanidad. "La incorporación de la población inmigrante ha sido vital en este aspecto. Tienen una educación sexual diferente y un bajo uso del preservativo", añade.

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