Cinco operaciones del CNP en Murcia relacionadas con bandas latinas se saldan con casi un centenar de detenido

Se rigen por reglas y cuando se incumplen, se imponen castigos como recibir golpes de un grupo de integrantes de la banda
Símbolos Religiosos Intervenidos En Una De Las Operaciones De Latin Kings
Símbolos Religiosos Intervenidos En Una De Las Operaciones De Latin Kings
CNP
Símbolos Religiosos Intervenidos En Una De Las Operaciones De Latin Kings

La Brigada Provincial de Información del CNP de Murcia ha desarrollado desde 2006 un total de cinco operaciones relacionadas con la implantación de bandas latinas que se han saldado con la detención de casi 80 personas relacionadas con la estructura de los Latin Kings o Ñetas.

La estadística se computa desde 2006 porque es el año en que se lleva a cabo la primera operación relevante, en este caso en Yecla (septiembre de 2006), con diez detenidos que trataban de formar parte un capítulo de Latin Kings.

Desde entonces y hasta 2011, desde la Policía Nacional, su portavoz, Javier de Pedro, asegura a Europa Press que "no se ha detectado una proliferación de estas bandas". El procedimiento consiste, ha explicado, en que "siempre hay alguien que intenta ocupar el lugar de la que se ha desarticulado".

Una segunda operación se desarrolló en marzo de 2007 en Alcantarilla, cuyo balance arrojó seis personas detenidas que estaban intentando consolidar un capítulo de Latin Kings en dicha localidad; seguida de otra posterior en 2008 en Murcia, que permitió desmantelar un capítulo de Latin Queens en creación, con el arresto de cinco jóvenes.

En julio del pasado año, una nueva operación desarrollada en dos fases permitió el arresto de casi medio centenar de personas, convirtiéndose en una de las más importantes a nivel nacional en la lucha contra Ñeta.

En concreto, en la primera fase, a primeros de julio de 2010, se logró desarticular tres capítulos en formación en Murcia, Lorca y Mazarrón, deteniendo a sus 13 integrantes, de entre 17 y 24 años, siendo dos de ellos menores. Del total, 11 eran de nacionalidad ecuatoriana, mientras que los dos restantes, boliviana y colombiana, respectivamente.

Los registros domiciliarios practicados permitieron encontrar una pistola simulada junto a abundante documentación, equipos informáticos y elementos de simbología asociada a la organización Ñeta, tales como rosarios, corazones o banderas con los colores azul, blanco y rojo.

Una segunda fase de esta operación, denominada 'Sombra' y realizada a finales de ese mismo mes, se saldó con más de una treintena de detenidos, de entre 16 y 27 años, que constituían un segundo escalón en la organización, al tratar de implantarse en las localidades de Murcia, Lorca y Mazarrón.

Mientras que los 13 integrantes de la organización, detenidos en una primera fase, ocupaban puestos de responsabilidad y coordinación, los 32 de la segunda fase ocupaban una posición interior en la estructura jerárquica de la banda y se ocupaban de llevar a cabo las instrucciones y consignas que emanaban de los responsables de la misma, así como del mantenimiento del orden interno y la seguridad del grupo.

Un capítulo que estaba "en formación"

Durante este año, se ha llevado a cabo una operación, denominada 'Coronas' (febrero), que permitió la detención de 12 personas, de entre 14 y 28 años, que trataban de formar un capítulo de Latin Kings en la ciudad de Murcia.

En concreto, el capítulo que se desarticuló se encontraba en formación y perseguía la consolidación de una organización estable basada en la estructura jerárquica y en la estricta obligación de obediencia y disciplina para todos los miembros del grupo.

De hecho, el líder de la banda, de 28 años y nacionalidad ecuatoriana, estaba considerado una persona autoritaria y muy violenta, que llegó a Murcia procedente de Madrid, donde ya se relacionaba con personas cercanas a los Latin Kings.

Además de los delitos de asociación ilícita, amenazas, coacciones, robo con violencia y lesiones, se le imputaron tres delitos de agresión sexual cometidos sobre jóvenes del entorno de la banda, de quienes abusó prevaliéndose de su posición de autoridad o ejerciendo de manera directa la violencia física.

Cómo se organizan y su forma de actuar

Las bandas de este tipo están habitualmente integradas por individuos muy jóvenes, algunos de ellos menores de edad, y se caracterizan por el empleo de métodos coactivos y violentos en el mantenimiento de la disciplina interna y en la defensa de los territorios urbanos que entienden como propios.

La disciplina interna se mantiene mediante un sistema de castigos que se imponen a los miembros díscolos o poco observantes de las normas por las que se rigen los capítulos.

Su procedimiento de captación suele partir de los contactos de los integrantes con otros jóvenes, bien en su círculo de amistades o en el entorno educativo.

Para ello, se agrupan y establecen sus jerarquías, llamando su confianza de unos a otros y estableciendo unos parámetros de actuación, "llegando a ser un problema de seguridad al cabo de un tiempo cuando está consolidada su estructura", ha apuntado Javier de Pedro.

Se tiene constancia de que estas bandas "han intentado crear capítulos incipientes, pero no se les ha dejado crecer y se han desarticulado varios, encontrándose un nivel organizativo en las operaciones bastante básico, embrionario prácticamente".

Es en capítulos o células independiente como funcionan para, posteriormente, comunicarse y una vez que se agrupan buscan contactos y vinculación con grupos similares en otros lugares. Comienzan acudiendo como invitados a pequeñas reuniones dotadas de cierto atractivo por su formalismo y por el ambiente de pertenencia a un grupo.

Si se continua asistiendo a las reuniones se empieza a vincular al joven con la organización, asignándole pequeñas tareas o responsabilidades, exigiéndole cuota, obediencia y asistencia a los encuentros.

Cuando alguna de estas reglas se incumple, conocido el conjunto de éstas y postulados como "literatura", se impone un castigo de índole física como puede ser recibir golpes de un grupo de integrantes de la banda o realizar algún tipo de ejercicio físico.

Por ello, este tipo de bandas pueden llegar a cometer delitos graves, en el caso de España han sido incluso homicidios y agresiones sexuales. En el seno de la banda, incluso abusos sexuales ya que hay chicas muy jóvenes que se acercan a las bandas y se les exige, según Javier de Pedro, "cierta prestación de carácter sexual hacia los responsables de la organización".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento