Desde primeras horas de la tarde grupos de jóvenes se concentraron en el Charco de la Pava, unos terrenos rústicos en Triana, que se utiliza como aparcamiento durante los días de la feria de Abril.

Los jóvenes hicieron botellón mientras eran rodeados por un fuerte dispositivo de seguridad que había sido movilizado por el Centro de Coordinación Operativa (Cecop), y que incluía a numerosos efectivos de la Policía Nacional y Local.

Con la llegada de la noche y ante la falta de buena iluminación los jóvenes concentrados empezaron a trasladarse a otros lugares de la ciudad.

El pasado viernes se celebró en Sevilla otro botellón convocado de forma anónima en el mismo lugar y que congregó a miles de personas.

Sin embargo, la lluvia provocó pronto su dispersión a otros lugares cubiertos, como los bajos del Puente de la Expiración o el antiguo apeadero de la Cartuja.

Precisamente, la nueva convocatoria, difundida por Internet, animaba a los jóvenes a acudir para "no dejar a medias" la concentración frustrada por las inclemencias del tiempo.

También hacía alusiones al macrobotellón más numeroso celebrado hasta ahora en Andalucía, el granadino, con las palabras: "Pobres granadinos, ¿Aún seguirán pensando que pueden superarnos?".

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